image/svg+xmlVoces Recobradas34vista desde unametodologíafoucaultianaLa Historia de un intelectual vista desde una metodología...AutorCarmen SestoPrograma de Historia oralMuseo RocaPrograma UBACYT-CONICETLa Historiade un intelectual25, 26 y 27 de agosto de 1999IV ENCUENTRO NACIONAL DE HISTORIA ORALVoces Recobradas34
image/svg+xmlVoces Recobradas351.1.1.1.1. Intr Intr Intr Intr IntroducciónoducciónoducciónoducciónoducciónUna de las dificultades de tipo lógico que restrin-ge la validez del género biográfico, en sus diversas mo-dalidades, es que se organiza de antemano en funciónde una identidad fija y estable a través del tiempo, pro-vocando la ilusión de continuidad y coherencia de unsujeto siempre igual a sí mismo. Este efecto ilusorioproviene de considerar a la identidad como algo úni-co y esencial, un núcleo central desde el cual se deter-mina la razón de ser de los sujetos individuales y co-lectivos, reduciendo la diversidad existente a uno solode los factores como si impregnara y diera sentido alresto. Un ejemplo ilustrativo de este abordaje tradi-cional se vincula al encarnizado y largo debate sobreel “ser nacional”, en el que se desconoce la pertinenciade ámbitos muy disímiles entre sí como familiares,religiosos, étnicos, sociales e ideológicos.Las preguntas acerca de si la identidad era esta-ble o si varía en el tiempo y el espacio, si funciona demanera monolítica o compleja estuvieron ausentes enlas preocupaciones metodológicas en general, y de lahistoria oral en particular en la década de 1960, ya queen este período inicial está mucho más acuciada poradoptar las preceptivas de cientificidad que exige laprofesionalización y el ingreso al ámbito académico.Estos interrogantes tampoco fueron incluidos en laagenda de debate entre 1970 y 1980, básicamente orien-tada a resolver cuestiones empíricas vinculadas con larecopilación y acumulación de entrevistas, a fin decontar con una masa crítica encorsetada en los mode-los estandarizados impuestos por la comunidad aca-démica.(1)Estos puntos comienzan a precisarse y explicitarseactivamente en relación con las temáticas de las nacio-nalidades y la inmigración hacia 1990, cuando ya sedispone de una sustancial renovación en el campoepistemológico y teórico. Lo que se hizo claro con es-tas dilucidaciones fue una concepción de la identidadmúltiple, diversa y flexible, haciendo referencia al pro-ceso social en el que una persona adopta determina-das características y rasgos según el ámbito, la posi-ción y el estatuto que ocupa en lo familiar, religioso,económico, intelectual y político. Poniendo de relieveuna dinámica identitaria cuya configuración es frag-mentaria y permeable, ya que en ese campo de dife-renciación, individualización y agrupamiento existe unconstante entrecruzamiento, flujo y pasaje de las di-versas modalidades adoptadas.(2)El problema es que aún después de esta descom-posición del campo identitario, ese proceso social sesigue pensando como expresión única de la concien-cia y la voluntad del individuo. Por consiguiente, elmaterial proveniente de la relación con los otros y elmundo que es la contracara de dicho proceso, quedaminimizado a un mero reflejo de esa interioridad, des-conociendo la entidad que le es propia.Una de las maneras de romper con ese modelopsicologista, es aceptar un recorte donde las caracte-rísticas diferenciadas provienen de las reglas, proce-dimientos y códigos de cada posicionamiento, ámbitoy estatuto, ya que son independientes de los sujetosque los ocupan. Esto implicó situarnos en el punto deintersección en que confluyen los dos aspectos consti-tutivos de las identidades: los sujetos y los otros/elmundo.Se trata de analizar la configuración de esas iden-tidades en dos niveles, el del trabajo sobre sí mismo yel de la interacción con los otros y el mundo. Poniendoespecial acento en el contexto histórico que estructuraesas identidades, porque ya no cabe duda que las so-ciedades y épocas en las que viven determinan los ras-gos fundamentales, por tanto, ponen en evidencia lastransformaciones que impone el tiempo y el espacio.(3)Las características que presentan las trayectoriasde vida puestas a consideración en este caso, nos lle-varon a optar por la noción de intelectuales específi-cos formulada por Michel Foucault, dado que ilustraperfectamente la emergencia de este nuevo tipo deintelectuales en nuestra historia más reciente.(4)En síntesis, éstos son los objetivos del trabajo quepresentamos al debate académico. No sin antes men-cionar que esta perspectiva articula lo teórico y lo prác-tico como indisociables, por tanto, los hallazgos pre-sentados surgieron de la información recogida en eltranscurso de las entrevistas que realizamos conHoracio Giberti y Hebe Clementi. La creación de estafuente oral demandó dos años de labor permanente,con una periodicidad semanal, durante los cuales serecopilaron 80 horas de grabaciones, utilizando losprocedimientos que se describirán en la segunda par-te de este artículo.2.2.2.2.2. Hacia una def Hacia una def Hacia una def Hacia una def Hacia una definicióninicióninicióninicióniniciónde las trde las trde las trde las trde las traaaaayyyyyectorectorectorectorectorias de vidaias de vidaias de vidaias de vidaias de vidacomo como como como como “intelectuales“intelectuales“intelectuales“intelectuales“intelectualesespecífespecífespecífespecífespecíficos”icos”icos”icos”icos”En rigor de verdad, debemos admitir que no separtió de esta conceptualización del intelectual espe-cífico como un a priorique se ponía a prueba, por elcontrario, llegamos a la misma a partir de la informa-ción recogida en las entrevistas y de la aplicación delmétodo arqueológico genealógico foucaultiano. Esta
image/svg+xmlVoces Recobradas36primera aproximación partió de una previa evalua-ción de su tarea como intelectuales y del curriculumvitae como carta de presentación y que, a la vez, nospermitió avizorar las rasgos en común de ambos per-sonajes, autorizándonos a incluirlos en la mismacategorización.(5)Haciendo una breve síntesis de las trayectorias deHoracio Giberti que es ingeniero agrónomo y HebeClementi que es licenciada en Historia, encontramosuna temprana especialización en áreas determinadasdel conocimiento científico: sector agropecuariopampeano e historia estadounidense respectivamen-te, el ejercicio de la docencia y la investigación en laUniversidad Nacional de Buenos Aires, en donde aúncontinúan con el dictado de materias de posgrado.Desde esta previa profesionalización son invita-dos a ejercer funciones públicas, y subrayamos estode “invitados”, porque esa nueva pertenencia se debea que poseen un bien escaso y muyvalioso: una información de alta cua-lificación y la previa capacitación,que los habilita para adentrarse enproblemas claves. Esta situación deexcepcionalidad es quizás, una de lascircunstancias que permiten sortearel paso por las horcas caudinas de lamilitancia política, Giberti hasta aho-ra no se afilió a ningún partido yClementi recién lo hace en su madu-rez, en 1982, en uno de los dos parti-dos mayoritarios de nuestro país: laUCR.A esos cargos públicos accedenen períodos neurálgicos de la Argen-tina, en períodos de transición demo-crática luego de gobiernos de facto.Giberti es nombrado secretario de Agricultura y Ga-nadería dependiendo del Ministerio de Economía acargo de José Gelbard durante la presidencia Perón-Perón entre 1973-1974, antes había ocupado el cargode presidente del INTA entre 1958-1962. En cambio,Clementi debuta como funcionaria en la presidenciaAlfonsín-Martínez, como directora del Museo Rocaentre 1983-1985 y luego, como directora del Libro en-tre 1985-1989, dependiendo ambos de la Secretaria deCultura de la Nación.Estos datos primarios nos posibilitaron la confi-guración de una imagen compartida, en donde debía-mos desechar de plano la existencia de prototiposexcluyentes de intelectuales o de políticos sólo en re-lación directa con la institución y el saber científico ocon los cuadros y estructuras burocráticas del partido.Estos intelectuales se politizan a partir de la actividadespecífica de cada uno y en lugares ultrasensibles comola universidad, participando en el diseño de sectoresesenciales del país como lo agrario, la educación y lacultura. Esa imagen nos llevó a un primer recorte con-ceptual provisorio como “intelectuales orgánicos” enel sentido marcado por Gramsci, y que planteó comoindagación la relación con el grupo a que pertenecen,al sector social que representan y la función que cum-plen como formadores de la conciencia de la socie-dad.(6)La inadecuación de esta categoría quedó en evi-dencia en cuanto avanzamos en las entrevistas, ya queestas figuras no aparecen como portadoras de valoresuniversales, ni un paso más adelante del resto de lasociedad, ni tampoco asumiendo la dirección ideoló-gica de la clase fundamental. Por el contrario, el ejer-cicio de la práctica política, de las condiciones de tra-bajo y la experiencia cotidiana de su vida íntima, mues-tran a Giberti y Clementi ocupados en resolver pro-blemas concretos y en estrecho contacto con los secto-res más desfavorecidos de nuestra sociedad. No unpaso más adelante para esclarecer suconciencia sino junto a ellos escu-chando lo que decían, ya que estabanplenamente convencidos de que so-bre ese tema sabían mucho más queellos, como ambos lo admiten lúci-damente.La respuesta es proporcionarleslos instrumentos y los medios paraque aprendan a defenderse por suspropios medios, sorteando o rodean-do las limitaciones y restricciones queimponen las circunstancias históri-cas. A modo de ejemplo de este pro-ceder podemos señalar el énfasis queadquirió el INTA en su papelasistencial y de extensión durante lasdos gestiones de Giberti, quien par-ticipaba activamente de estos programas dereconversión que aminoraron las distancias existentesentre los pequeños y grandes productores.El Plan Nacional de Lectura elaborado porClementi desempeñó un papel similar. Instrumentadoa través de las Bibliotecas Públicas, se orientó en pri-mera instancia hacia los marginados de laescolarización: niños, jóvenes y adultos, más tarde, seincluirán a los escolares. Pero siempre en las provin-cias más desfavorecidas, por su pobreza y ubicacióngeográfica, como por ejemplo las fronterizas. Esas vo-ces se escucharon en diferentes talleres: literarios, dehistorias y experiencias de vida, y generaron una di-námica de creación de archivos orales, de exposicio-nes de muy diverso tenor que, en todos los casos, fue-ron implementados desde esos mismos sectores socia-les.La tarea de estos intelectuales no sólo les crea ene-migos sino que encuentra grandes obstáculos y losexpone al riesgo de quedar aislados al no dejarse ma-La tarLa tarLa tarLa tarLa tarea de estos inte-ea de estos inte-ea de estos inte-ea de estos inte-ea de estos inte-lectuales no sólo leslectuales no sólo leslectuales no sólo leslectuales no sólo leslectuales no sólo lescrcrcrcrcrea enemigea enemigea enemigea enemigea enemigos sino queos sino queos sino queos sino queos sino queencuentrencuentrencuentrencuentrencuentra gra gra gra gra grandesandesandesandesandesobstáculos y los eobstáculos y los eobstáculos y los eobstáculos y los eobstáculos y los exponexponexponexponexponeal ral ral ral ral riesgiesgiesgiesgiesgo de quedaro de quedaro de quedaro de quedaro de quedaraislados al no dejarseaislados al no dejarseaislados al no dejarseaislados al no dejarseaislados al no dejarsemanipular por losmanipular por losmanipular por losmanipular por losmanipular por losparparparparpartidos políticos o lostidos políticos o lostidos políticos o lostidos políticos o lostidos políticos o losaparaparaparaparaparatos sindicales.atos sindicales.atos sindicales.atos sindicales.atos sindicales.
image/svg+xmlVoces Recobradas37nipular por los partidos políticos o los aparatos sindi-cales. Aunque la restricción más importante es que nopueden desarrollar su estrategia por falta de apoyosexternos como ocurrió en estos casos estudiados.Giberti no logró implementar su Ley de renta normal-potencial y Clementi que se continuara el Plan Nacio-nal de Lecturas.El desplazamiento de intelectuales a funcionariospúblicos evidencia un corte, una discontinuidad en susrasgos identitarios, ya que asumir esta politizaciónimplicó un desprendimiento de sí mismo y un trans-formarse en algo distinto en un espacio extraño, cuyasreglas desconocen. Una práctica transformadora quemodifica muchos aspectos en la vida de Giberti yClementi, e incluso cambia aquello que es la razón deser de los intelectuales: la relacióncon la verdad. Un objetivo siemprepresente en sus luchas, pero ya nocomo un ente universal y temporal,sino como la consecución de estos fi-nes pequeños y particulares y desdelas condiciones históricas y concre-tas.En este punto conviene una dis-gresión que atiende a la ética de es-tos personajes. En un país atravesa-do por el fantasma de la corrupción,no hay un solo indicio ni denunciade que hayan saqueado al erario na-cional. Por el contrario, son capacesde desprenderse de sí mismos, y desus cargos salieron con los mismosbienes que tenían antes. Desde estaperspectiva, estas trayectorias devida tienen un valor ejemplificadorque son fundamentales para nosotrosy las generaciones venideras.La serie de características enun-ciadas nos permite afirmar que éstosson nuevos intelectuales que, de manera alguna, sepueden ligar con la intelligentziaque les precede sinoque inauguran una modalidad cuya habilitación sesustenta fundamentalmente en el ejercicio y la respon-sabilidad ciudadana. Esas características se ajustan per-fectamente a la definición de intelectuales específicosde Michel Foucault, denominando como tal a los indi-viduos que hacen uso de su saber y competencia conrelación a la práctica política, cuya postura no repre-senta valores universales ni indica por adelantado alpueblo lo que debe hacer y pensar.(7)La fertilidad analítica de este recorte conceptualva mucho más allá de la congruencia y coherencia quese pide porque provoca una apertura que permite unanálisis múltiple, diferenciado y detallado, que se re-fiere a individuos concretos con un cuerpo marcadopor las huellas de la historicidad, de las condicionesde vida y de trabajo, de la esfera de lo privado y de lasexualidad, de sus familias, amores y odios, de las re-laciones entre las prácticas académicas, políticas, so-ciales y económicas. Podemos concluir que los intelectuales específi-cos presentan una serie de características, que permi-ten reconocerlos e individualizarlos.1. Son profesionales ya prestigiados en su activi-dad académica y, desde allí, acceden a la función pú-blica sin considerarse portadores de valores eternos nide crítica universal.2. Estos intelectuales son a la vez padres de fami-lia, vecinos, deportistas, consumidores, es decir, sonhombres concretos que parten de una posición socialy de los medios que disponen y que adoptan diferen-tes identidades en cada ámbito que,a la vez, se entrecruzan e interre-lacionan entre sí.3. En su condición de intelectua-les siguen teniendo una estrecha vin-culación con las instituciones acadé-micas y políticas.4. Los planes y las funciones quepueden adoptar estos intelectualespolítizados ocurren en un espacio yaconfigurado que no permite indefi-nidas modificaciones.5. Esa práctica política se centraen la responsabilidad que asumencomo ciudadanos plenos con una in-tervención directa en las políticas pú-blicas, que excede ampliamente el as-pecto representativo que consiste envotar periódicamente. Ese accionarse da en determinadas condicioneshistóricas y en un espacio reglamen-tado que limita las posibilidades detransformación.6. La función de estos intelectua-les cambia radicalmente en un punto: la relación conlas masas. Su objetivo no es iluminar la conciencia delas masas para que conozcan sus necesidades, sino pro-porcionarles los medios para que las satisfagan.7. Esta especificidad está atravesada por las for-mas identitarias que fluyen de lo privado, lo íntimo ylo familiar.8. Los intelectuales específicos son hombres his-tóricos que pertenecen a un tiempo determinado, y alas contingencias e imposibilidades que plantea eseazaroso camino.En síntesis, estos intelectuales no son un puro es-píritu que conserva y preserva esa identidad en cadauno de los ámbitos en que transcurre su vida sino que,por el contrario, esa identidad varía en cada una delas dimensiones en que emergen. Son hombres mate-rializados con un cuerpo que está sometido a diversosEsas carEsas carEsas carEsas carEsas características seacterísticas seacterísticas seacterísticas seacterísticas seajustan perfajustan perfajustan perfajustan perfajustan perfectamente aectamente aectamente aectamente aectamente ala defla defla defla defla definición de intelec-inición de intelec-inición de intelec-inición de intelec-inición de intelec-tuales específtuales específtuales específtuales específtuales específicos deicos deicos deicos deicos deMichel FMichel FMichel FMichel FMichel Foucault,oucault,oucault,oucault,oucault, deno- deno- deno- deno- deno-minando como tal a losminando como tal a losminando como tal a losminando como tal a losminando como tal a losindiindiindiindiindividuos que hacenviduos que hacenviduos que hacenviduos que hacenviduos que hacenuso de su saber y com-uso de su saber y com-uso de su saber y com-uso de su saber y com-uso de su saber y com-petencia con rpetencia con rpetencia con rpetencia con rpetencia con relación aelación aelación aelación aelación ala práctica política,la práctica política,la práctica política,la práctica política,la práctica política, cuy cuy cuy cuy cuyaaaaaposturposturposturposturpostura no ra no ra no ra no ra no repreprepreprepresentaesentaesentaesentaesentavvvvvaloraloraloraloralores unies unies unies unies univvvvversales niersales niersales niersales niersales niindica por adelantado alindica por adelantado alindica por adelantado alindica por adelantado alindica por adelantado alpuepuepuepuepuebbbbblo lo que delo lo que delo lo que delo lo que delo lo que debebebebebehacer y pensarhacer y pensarhacer y pensarhacer y pensarhacer y pensar.....
image/svg+xmlVoces Recobradas38regímenes: de trabajo, de placer y de enfermedadesque dejan huellas de su historicidad. Estos hombresconcretos muestran una multiplicidad y diversidad deposicionamientos y de estrategias identitarias segúnel estatuto y la dimensión que se trate y la fluidez oestancamiento de cada espacio social.3. Los intelectuales3. Los intelectuales3. Los intelectuales3. Los intelectuales3. Los intelectualesespecífespecífespecífespecífespecíficos y el métodoicos y el métodoicos y el métodoicos y el métodoicos y el métodoarararararqueológico-gqueológico-gqueológico-gqueológico-gqueológico-genealógicoenealógicoenealógicoenealógicoenealógicofffffoucaultianooucaultianooucaultianooucaultianooucaultianoLa cuestión ahora es la siguiente: cómo pudimosacceder a esa multiplicidad de identidades, cuidado-samente individualizadas en los diversos posi-cionamientos y juegos de desgajamientos en las tra-yectorias de los sujetos. Sin duda, fue el resultado dela aplicación del método arqueológico-genealógicofoucaultiano.Llegó el momento de considerarla renovación metodológica que en-gendra la propuesta foucaultiana,cuya crítica acerba a la funciónsintetizadora del YO, nos orientó enla dirección de introducir el artificiode dejar en suspenso lo más eviden-te e inmediato: la identidad como unsustrato homogéneo, estable, perma-nente y siempre igual a sí mismo.(8)Este artificio crítico debe enten-derse según Foucault, como una pre-caución destinada a evitar referir osubsumir la multiplicidad en un solorasgo, afrontando el riesgo que aparezca el entrama-do histórico en procesos diferenciados según los ám-bitos y niveles en que operan. Desde el punto de vistaepistemológico, se trata de un poliedro de inteligibili-dad, que carece de un punto central o un núcleo queexplique todo, cuyas caras van siendo definidas a me-dida que se despliega esa variada gama de elementos,procediendo por saturación progresiva.3.a.3.a.3.a.3.a.3.a. El método g El método g El método g El método g El método genealógicoenealógicoenealógicoenealógicoenealógicoEste marco metodológico resulta básico para ana-lizar los juegos identitarios dando cuenta de la com-plejidad sobre la que se edifica, debido a que se tratade una constelación de factores heterogéneos que sedesplazan y cambian muy rápidamente. En vez dedefinir el núcleo central de una identidad y desdeallí, buscar su génesis a través del tiempo, lo quehicimos fue remitirnos a los comienzos tomando elplano más bajo y elemental. Para ello, disponíamosde dos conceptos: procedencia y emergencia, quenos permitieron distinguir las diferentes formas deidentidad y su pertenencia, reconstruyendo los hi-los que los atan, los relacionan y los hacen darseunos a otros.(9)Para precisar aquí el patrón de inteligibilidadque nos proporcionaron dichos conceptos, los des-cribiremos separadamente aunque visualizando losefectos de conjunto. La procedencia remite a loscomienzos donde se encuentra una multiplicidadde características brumosas y luego un gran núme-ro de desplazamientos, modificaciones e inversio-nes de esos rasgos diferenciados. Situarnos en loscomienzos fue algo fantástico, porque quedó enevidencia la inexistencia de una esencia cuyo desa-rrollo determina lo que viene posteriormente.En el plano más elemental sólo encontramos aniños absorbidos por la escena familiar: padres, her-manos, vecinos y amigos, cuyo entorno secircunscribía a los límites de la casa paterna, y unpoco más adelante, a la escuela, lospaseos, los medios de comunica-ción, el barrio, el centro y los pri-meros ritos de iniciación sexual.Por ejemplo, la construcción de lacasa propia como proyecto familiartiene un valor emblemático paraClementi, que es hija de inmi-grantes italianos.Esos comienzos no revelanninguna intencionalidad, ni desig-nio, ni llamado vocacional, ni nin-gún otro sentido originario queimprime un rumbo fuera de cual-quier datación cronológica, comoun proyecto que atraviesa su existencia y le da sig-nificación. Incluso el giro que va tomando la vidaen cuanto a elecciones personales y profesionalesestá rodeado de circunstancias azarosas y fortuitas,en un caso surge de improviso y en otro por des-carte de otras opciones.En cuanto acceso a la función pública, tampo-co se advierte la existencia de un destino manifies-to ni una evolución hacia esas formas más presti-giosas de ser. Por el contrario, lo que se percibe esla inestabilidad de una figura única como identi-dad preservada, ya que constantemente se atravie-san diversas experiencias, desafíos y sufrimientosen el campo práctico en que viven, trabajan y amany de los cuales no se sale de la misma manera enque se entró.Este juego de transformaciones específicas entiempos diferenciales recorrió las entrevistas yadesde el comienzo, fue el recurso que posibilitó sor-SituarSituarSituarSituarSituarnos en los comien-nos en los comien-nos en los comien-nos en los comien-nos en los comien-zzzzzos fue algos fue algos fue algos fue algos fue algo fo fo fo fo fantásticoantásticoantásticoantásticoantástico,,,,,porporporporporque quedó en eque quedó en eque quedó en eque quedó en eque quedó en evi-vi-vi-vi-vi-dencia la inedencia la inedencia la inedencia la inedencia la inexistenciaxistenciaxistenciaxistenciaxistenciade una esencia cuyde una esencia cuyde una esencia cuyde una esencia cuyde una esencia cuyooooodesardesardesardesardesarrrrrrollo determina loollo determina loollo determina loollo determina loollo determina loque viene posterque viene posterque viene posterque viene posterque viene posterior-ior-ior-ior-ior-mentementementementemente.....
image/svg+xmlVoces Recobradas39tear las cronologías basadas en el devenir humano:infancia, juventud, madurez y vejez. Aunque separtió de la percepción que tenían los sujetos de esasdislocaciones en su forma de ser, esta cuestión fueretomada ante cada contingencia o avatar que im-plicara una transformación sobre sí mismo o en larelación con los otros y el mundo.Ciertamente, esta precaución ofrece un campode reflexión importante, ya que favorece la visuali-zación de circunstancias que antes no habían sidoconsideradas, por ejemplo, la experiencia devas-tadora que fue para Hebe Clementi la salida de lafunción pública de manera imprevista y en mediode la hiperinflación. Un efecto traumático que sólopudo ser verbalizado pidiendo un corte abrupto enlas entrevistas, que se retomaron con toda normali-dad una vez aclarado el peso de ese hecho. En cam-bio, Horacio Giberti narró como un sucesoconmocionante la enfermedad de su hijo menorcuarenta años atrás. Sin embargo, lo que finalmen-te apareció fue la transposición entre esa circuns-tancia y la que había vivido recientemente con suhijo mayor que, en cierto modo, lohabía conectado con su propia de-bilidad y vejez.Estos resultados son insepara-bles de los efectos del otro concep-to genealógico: la emergenciacomo irrupción de un aconteci-miento cuya razón de ser no sepuede retrotraer desde el presen-te hacia el pasado. Esta precauciónmetodológica previene uno de loserrores más habituales, la creenciaengañosa que el prestigio alcanza-do en el presente ya está en ger-men en el origen, situando al prin-cipio lo que está al final o las últimas cosas antesque las primeras.(10)Este paciente movimiento invirtió la relaciónestablecida entre la irrupción de determinados su-cesos y la intencionalidad de los protagonistas, yaque esa voluntad de acción se veía constantementecontrarrestada por las restricciones que imponía unespacio configurado por reglas, procedimientos ysímbolos. Esas precauciones hicieron visibles lascondiciones que determinan el quehacer, ya queestas regulaciones limitan la voluntad y el accionarde los sujetos.Un caso muy interesante, en ese sentido, fue laUniversidad Nacional de Buenos Aires en la queactuaron Clementi y Giberti en la década de 1960,transida por los conflictos entre grupos de diferen-te pertenencia ideológica, de limpieza de sectoresreaccionarios y de formulación de la carrera docente.En ambos casos, para su suerte o desgracia, la acepta-ción, rechazo o desplazamiento dependerá de la for-tuna que tenga el sector al que aparecen ligados. Enesos enfrentamientos, quedan implicados en las luchasde los que se disputan el control de un espacio de po-der, bastante estrecho y limitado.3.b3.b3.b3.b3.b..... El análisisEl análisisEl análisisEl análisisEl análisisarararararqueológico-gqueológico-gqueológico-gqueológico-gqueológico-genealógicoenealógicoenealógicoenealógicoenealógicoEl análisis arqueológico-genealógico opera sobrelos dos procesos esenciales de configuración de iden-tidades: la transformación sobre sí mismo y la rela-ción con el mundo y con los otros. Esta confluenciaentre el sujeto, los otros y el mundo se da en los diver-sos estatutos, posicionamientos, y ámbitos que se ocu-pan simultánea y sucesivamente. El punto principales que esos procesos se encararon desde las técnicas ylas prácticas usadas, como el conjunto de los “modosde hacer” más o menos regulados, o reflexivas, a tra-vés de las cuales se intenta conocer, trabajar, hablar,amar y eventualmente modificar loreal.(11)Hay que señalar que la confluen-cia de las formas identitarias, se ana-lizó distinguiendo tres niveles de in-terrogación. El primero es el recorteinstitucional de las posiciones, esta-tutos y ámbitos, donde se proyectanprogramas, objetivos inherentes, fina-lidad, obligaciones, derechos y valo-res. El segundo el de los efectos entreel recorte institucional y los indivi-duos en su funcionamiento concreto,donde se presentan las contradiccio-nes, fallas en los cálculos, errores, im-previsiones y confusiones propias de esa puesta enpráctica. El tercero el de las configuraciones estratégi-cas formuladas por los individuos, donde laintencionalidad y el accionar están inscriptos en lasmatrices transformadoras de la realidad.Este abordaje facilitó la indagación acerca de lasoperaciones realizadas por el sujeto en su cuerpo, sen-timientos, deseos, impulsos, condiciones de vida, elec-ciones existenciales, modo de regular la conducta y defijarse para sí mismo fines y medios, ya que cada unade ellas implicó ciertas formas de aprendizaje, de ad-quisición de habilidades y de algunas actitudes. Perocuya inteligibilidad e iluminación provenían de unaexperiencia del afuera en donde el sujeto es objetivadopara sí y para los demás.En primera instancia nos ocupamos de las trans-formaciones sobre sí mismo, tomando en cuenta lascuatro técnicas fundamentales: las que permiten pro-ducir, transformar o manipular cosas; las que ofrecenEn cuanto acceso a laEn cuanto acceso a laEn cuanto acceso a laEn cuanto acceso a laEn cuanto acceso a lafunción púbfunción púbfunción púbfunción púbfunción pública,lica,lica,lica,lica, tam- tam- tam- tam- tam-poco se adpoco se adpoco se adpoco se adpoco se advierviervierviervierte late late late late laeeeeexistencia de un desti-xistencia de un desti-xistencia de un desti-xistencia de un desti-xistencia de un desti-no manifno manifno manifno manifno manifiesto ni unaiesto ni unaiesto ni unaiesto ni unaiesto ni unaeeeeevvvvvolución hacia esasolución hacia esasolución hacia esasolución hacia esasolución hacia esasffffformas más prormas más prormas más prormas más prormas más prestigio-estigio-estigio-estigio-estigio-sas de sersas de sersas de sersas de sersas de ser.....
image/svg+xmlVoces Recobradas40sentidos, símbolos y significaciones; las que incidenen la conducta de otros individuos y las que efec-tuaron por su propia cuenta llegando a pensarde otro modo, y buscando algo mejor para ellosmismos. Sin embargo, esta tarea comenzó ape-lando a la percepción de los sujetos, pidiéndolesque señalaran cuáles eran a su juicio esos momen-tos de transformación, y por qué habían sucedi-do. Esta indagación la retomamos continuamen-te, permitiéndonos revisar y enriquecer la res-puesta inicial.La otra cuestión fue la dispersión de la iden-tidad en variadas posiciones, estatutos y ámbi-tos. En este contexto debimos avanzar con pru-dencia, definiendo esas tres categorías de la ma-nera más concisa y precisa posible. Es importan-te aclarar que no fue fácil caracterizar cada unade esas nociones, cuyo conocimiento es aún muyimperfecto y son numerosos los puntos de de-sacuerdo, ni tampoco se pueden establecer cla-ramente las fronteras entre unos y otros. En cuan-to al pasaje y flujo de uno a otro estatuto o posi-cionamiento o ámbito, se observaron a partir delas necesidad de controlar capacidades, utilizar-las al máximo y mejorar el efecto útil de los tra-bajos, así como distintas contingencias e imposi-bilidades que las impulsaron.Por otra parte se definieron esas categoríasen la instancia que le es propia e irreductible unaa otra y, a partir de las relaciones que se anudanentre ellas. Por estatuto entendemos las exigen-cias y requisitos que debe cumplir un individuopara ocupar un lugar, cuya pertinencia es deter-minada por el ámbito y la posición correspon-diente. La posición alude a las superficies de di-ferenciación, agrupamiento, desplazamiento ydistribución de los individuos, cuya delimitacióndepende del estatuto y el ámbito correspondien-te. El ámbito se conforma con las instituciones,los sistemas de percepción, pensamiento, valo-res de ese tiempo y los comportamientos genera-les e individuales impregnados por los estatutosy posiciones.La emergencia de las modalidades iden-titarias como profesionales, ciudadanos, padres,investigadores y funcionarios públicos, surgió apartir del interjuego de las tres categorías espe-cificadas. En el caso del estatuto como intelec-tuales se estableció indagando en la red de in-formación, en el régimen de premios y becas,en el intercambio de información con los pares yotros grupos de poder, en los circuitos de inves-tigación y enseñanza, públicos y privados y enla corporación académica. En cuanto a la funciónpolítica, ubicándolos en la estructura partidaria,administrativa burocrática y respecto a las jerar-quías de distinta clase.(12)Respecto al papel de los intelectuales se pri-vilegiaron los criterios de competencia y saberque comporta ese tipo de actividad, y nos llevó apreguntarnos acerca del tipo de estudios cursa-dos, las características del sistema universitario,de los programas, de las modalidades de inser-ción en los ámbitos académicos y de investiga-ción. Un lugar relevante se confirió a las obrascomo razón de ser de esa actividad, pero se hizoremitiendo a una estructura en la que se deter-minaban los elementos autónomos y hete-rónomos, poniendo entre paréntesis los princi-pios del autor y del libro.Este mismo tipo de precauciones se introdu-jo al tratar el campo identitario que encuentra sulegitimidad y aplicación en el hogar, la familia,el género y otras instituciones de muy diversoalcance. Con esta sintética y breve enumeración,intentamos dar cuenta de las categorías, temas yniveles de análisis que implementamos.(13)4. Conclusiones4. Conclusiones4. Conclusiones4. Conclusiones4. ConclusionesEmprender la aventura de aplicar el métodoarqueológico-genealógico foucaultiano fue un de-safío tan enorme como fascinante, ya que exigióuna reconversión de nuestra forma de pensar. Ala vez, debimos abandonar las técnicas y los pro-cedimientos tradicionales por otros conceptos,categorías y precauciones de cuya solvencia yconfiabilidad carecíamos de precedentes, asícomo de una masa crítica que nos sirviera de re-ferente haciendo el camino menos fangoso. Enconsecuencia, este trabajo debió cumplir ese pro-pósito y esperamos que tenga alguna utilidad.Los resultados que obtuvimos en esta expe-riencia son francamente alentadores. Poner en-tre paréntesis las categorías vacías e inclusivasdel sujeto o las funciones sintetizadoras del“YO”, iluminó una multiplicidad de identidadescon su régimen de materialidad y que se obser-van como un “saber hacer algo” a través de prác-ticas históricas, locales, específicas y discon-tinuas.Esta formulación ofrece un modelo de análi-sis biográfico que rompe con el modelopsicologista, haciendo que aparezca todo un con-junto de procesos desplazados, excluidos y olvi-dados, que ponen en evidencia las transforma-ciones que produjo sobre sí el sujeto en relacióncon los otros y el mundo con las diversas formasidentitarias que le corresponden, dejando bien enclaro que en el fondo de las cosas no hay nadapermanente ni estable.
image/svg+xmlVoces Recobradas41NOTAS1.Vasina, Jan. Oral, Tradition: A study in historical methodology, Lon-dres, Routledge and Kegan, 1965.Grele, Ronald (comp.). Envelopes of sound. The art of oral history,Chicago, Precedente Publishing, 1975.Thompson, Paul. “Problems of method in oral history”, Oral History,v.1, nº 4, 1972, pp. 1-47.Thompson, Paul. The voice of the past, Oxford, Oxford University Press,1988.Thompson, Paul (comp.). Our common History. 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Respuesta auna cuestión” en Julia Varela y Fernando Álvarez-Uría (comp.) Sabery verdad, Madrid, Ediciones de La Piqueta, 1991, pp. 47-74.Foucault, Michel. “Respuesta a Esprit” en Oscar Terán (comp.) Eldiscurso del poder, 2º ed., Buenos Aires, Gandhi-Folios ediciones, 1985,pp. 64-87.Foucault, Michel. “Contestación al Círculo de Epistemología” enOscar Terán (comp.) El discurso ... op.cit.pp. 88-124.4.Ibídemcita 3.5.Gramsci, Antonio. Los intelectuales y la organización de la cultura,Buenos Aires, Nueva Visión, 1972, pp. 210.Gramsci, Antonio. La formación de los intelectuales, México, Grijalbo,1967, pp. 2-159.Gramsci, Antonio. La política y el Estado moderno, Barcelona, Planeta-De Agostini, 1985, pp. 15-166.Portelli, Hugues: Gramsci y el bloque histórico.2º ed., Buenos Aires, SXXI, 1974, pp. 93-134.6.Ibídem cita 5.7.La definición de intelectuales la extrajimos de Michel Foucault,“La función política del intelectual ... op.cit., pp. 47-74.Foucault, Michel: “Respuesta a ...op.cit., pp. 64-87.8. Ibídem cita 7.9.Ibídem cita 7.10.Foucault, Michel. “Nietzsche, la Genealogía, la Historia” en JuliaVarela y Fernando Álvarez-Uría (comp.) Microfísica... op. cit. pp. 7-30.En rigor de verdad, este artículo fue publicado en francés en 1971 yluego fue publicado en diversas compilaciones.Foucault, Michel. “La función política del intelectual. Respuesta auna cuestión”, en Julia Varela y Fernando Álvarez-Uría (comp.) Sa-ber y... op. cit. pp. 47-74.Morey, Miguel (comp.). Michel Foucault, Tecnologías del yo, 2º ed. Bar-celona, Paidós, 1991, pp. 9-49.Foucault, Michel. El yo minimalista y otras conversaciones, Buenos Ai-res, La marca, 1996, pp. 11-100.Foucault, Michel. Hermenéutica del sujeto, La Plata, Altamira, 1997,pp. 9-125.11.Hemos agrupado el análisis arqueológico-genealógico tomandoel agrupamiento de Foucault, cuando señala: “...Anteriormente sos-tuve que la diferencia entre arqueología y genealogía es la que mediaentre un procedimiento descriptivo y un procedimiento explicativo...”Morey, Miguel. “Introducción” en Michel Foucault, Tecnologías ...op.cit.p.14.Foucault, Michel. Historia de la sexualidad 1, 12º ed. México, S XXI,1985, pp. 7-160.Foucault, Michel. Historia de la sexualidad 2. 1º ed. México, S XXI, 1986,pp. 7-35.12.Foucault, Michel. Historia de la... op. cit. pp. 7-160.Foucault, Michel. Historia de la... op. cit. pp. 7-35.Foucault, Michel. Historia de la sexualidad 3, 1º ed. México, S XXI, 1987,pp. 38-93.Foucault, Michel. “Tecnologías del yo” en Miguel Morey, MichelFoucault ... op.cit.pp. 47-48.13.Ibídem cita 12.
image/svg+xmlVoces Recobradas42Voces Recobradas42A históriade umintelectual vistadesde una metodologiafoucaultianaO presente trabalho tem dois objetivos,um deles teórico e o outro metodológico.O primeiro objetivo é apresentar ao debateacadêmico a categorização foucauldiana deintelectuais específicos, aplicando-a em duasfiguras paradigmáticas como são HebeClementi e Horacio Giberti. Esta definiçãopermite captar a emergência de um novotipo de intelectual, cuja maneira de ser seorganiza em torno de tres eixos: a relaçãocom os outros, com a verdade, e com sipròprio.O segundo objetivo é uma contribução,também de raíz foucauldiana, destinada aoperar analíticamente no modo pelo qualas identidades devenem e se constroem se-gundo os diversos posicionamentos, estatu-tos e âmbitos que vão adotando e mudandonos contextos históricos que lhes sãopróprios.An intellectual’sstory seenfrom afoucaultienmethodologyThe present paper has two goals, the firstone is theoretical, and the other one ismethodological. The former is to present the"Foucaultien"categorisation to the public de-bate: specific intellectuals, using it in twoparadigmatic figures, as Hebe Clementi andHoracio Giberti do. This definition allowswinning the emergence of a new type ofintellectual, whose way of being is organisedaround three axes, the relationship with theothers, with the truth, and with himself.The latter is also a "Foucaultien"rootedness contribution, destined to operateanalytically in the way in which identitiesbecome and are built according to thediverse positions, statutes and fields that theyadopt and change in the historical contextsthat are characteristic of them.L’ histoire d’un intelectuelvue d’ uneméthodologiefoucaultienneLe présent travail a deux objectives, und'eux est théorique et l'autreméthodologique. Le premier est présenterla categorisation «Foucaultienne» au débatacadémique : des intellectuels spécifiques quel'employent en deux figures paradigmatiquescomme Hebe Clementi et Horacio Giberti.Cette définition permet de captiverl'émergence d'un nouveau type d'intellectuel,dont sa manière d'être s'organise autour detrois axes, le rapport avec les autres, avec lavérité et avec soi-même.Le deuxième est une contribution deracines «Foucaultiennes» aussi, destinée àoperer analytiquement de la façon danslaquelle les identités deviennent et sontconstruites selon les divers positions, statutset circuits que adoptent et changeant dansles contextes historiques que leurappartiennent.