image/svg+xml48E N C U E N T R O SEl patrimoniodocumental privadoLas II Jornadas de Archivos de Buenos Airesavivó el debate sobre “El patrimonio documen-tal privado”. Allí quedaron planteadas laspreocupaciones de especialistas e interesadosen custodiar los archivos privados que seencuentran en la ciudad. Las problemáticasgiraron en torno al “acceso a la documentacióncomo garantía de las prácticas democráticas”, alos “movimientos sociales y sudocumentación”, a los archivos de lasexperiencias “de la sociedad civil”, a las de las“fuentes de imagen y sonido” y también a la“identidad, reconocimiento y documentación”.El Instituto Histórico de la Ciudad junto con laComisión para la Preservación del Patrimonio48
image/svg+xml49Histórico Cultural de la Ciudad de BuenosAires y la Legislatura de la Ciudad organizaronestas jornadas con el objetivo de reflexionar eintercambiar experiencias sobre la necesidad derealizar la señalización, hacer accesibles ypreservar los valiosos fondos existentes en laCiudad. Las más diversas organizaciones einstituciones llegaron al acuerdo de que para elestudio y la investigación de nuestro pasado yde nuestro presente, se hace imperiosa lanecesidad de conocer, identificar y consultarimportantes documentos que por diversasrazones están en poder de entidades,organizaciones y particulares.La licenciada Liliana Barela, directora delInstituto Histórico, destacó la acción delInstituto desde la recuperación de lademocracia y cómo “la implementación de laHistoria Oral, permitió escuchar las voces delos vecinos que estaban calladas durante ladictadura”; y cómo eso permitió también “elacceso a una nueva forma de documentación”con la que el Instituto está trabajando. Por suparte, Horacio Tarcus contó la experiencia delCentro de Documentación e Investigación de laCultura de Izquierda en la Argentina(CEDINCI) que dirige, y explicó lascomplicaciones para construir un archivo deesas características, inédito en el país. Expusolas dificultades de tipo burocráticas quedebieron sortearse por parte de algunasautoridades tanto académicas comogubernamentales; sin embargo, resaltó lapredisposición y voluntad de los particularesque se acercaron y que con sus colaboraciones ydonaciones contribuyeron al funcionamientodel CEDINCI. Subrayó como un avance larealización de estas Jornadas donde se notabaun trabajo en conjunto entre distintasorganizaciones e instituciones.Mirta Lobato, historiadora de la UBA, hablósobre su experiencia como investigadora en elmundo del trabajo y la cultura obrera. Conreferencia a su investigación sobre lostrabajadores del gremio de la carne en Berisso(1904-1970), resaltó la importancia de ladocumentación que utilizó y cómo unametodología abierta le permitió explorararchivos de empresas, testimonios orales,informes oficiales, la prensa gremial, local ynacional. Por su parte, Ana Westein,investigadora de la AMIA, destacó laimportancia de la documentación comoconstructora de memoria.Las jornadas fueron inauguradas por laSubsecretaria de Patrimonio Cultural,arquitecta Silvia Fajre; la presidenta de laComisión de Preservación, licenciada LeticiaMaronese y el legislador de la Ciudad, profesorLuis García Conde, propulsor de una ley endefensa de los archivos privados. En esaoportunidad, también se contó con la presenciade representantes de diversas organizaciones,particulares e investigadores, entre ellos:Hernán Invernizzi, María Inés Rodríguez, NoraCortiñas, Edgardo Rocca, Olga GarcíaD’Agostino, Jorge Falcone, Carlos Ulanovsky,Felicitas Luna, Estela de Carlotto, Diana Maf-fia, Kurt Frieder, Ana Lía Rey y Estela Pagani,quienes se proclamaron, de manera unánime, afavor de una ley marco que regule el cuidadode los documentos privados. Todavía no existeesa ley ni tampoco una que custodie elpatrimonio documental público. Se dio elprimer paso de un largo camino que esperemosno se desvíe.