image/svg+xml36Los barrios Carlos Gardel y Presidente Sarmiento, generalmente denominados “Villa Carlos Gardel”, se encuentran ubicados en la localidad de El Palomar, partido de Morón. Surgieron como parte del Plan Nacional de Erradicación de Villas de Emergencia (PEVE) creado por la Ley 17.605 en el año 1968, durante el gobierno de facto del general Juan Carlos Onganía. Este proyecto fue promovido por la Secretaría de Vivienda dependiente del Ministerio de Bienestar Social y respaldado por el Banco Hipotecario Nacional que ofreció plazos de pago de cincuenta años.Este plan de vivienda afectó a población en situación habitacional grave en distintas zonas de Capital Federal y del Gran Buenos Aires e incluía en una primera etapa la construcción del Núcleo Habitacional Transitorio1y el traslado de la población afectada al proyecto. Posteriormente estas familias ocuparían los monoblocks, o departamentos defnitivos, que se estaban construyendo.2La erradicación de las villas supuso el desalojo por medio de tratos violentos, el traslado de las personas, y de las escasas pertenencias que alcanzaban a rescatar, en camiones del Ejército; todo lo que no podían llevarse era quemado y aplastado por las topadoras. La erradicación también incluía la expulsión a sus países de origen de inmigrantes bolivianos, chilenos, paraguayos que habitaban las villas.3La nueva mudanza se recuerda como una situación bastante caótica y en algunos casos denigrante, según lo relatan vecinas del barrio:En el momento de la mudanza como era supuestamente gente que venía de la villa, le fumigaban para que entren limpios adentro del departamento... veníamos en un camión grande de los militares y también fumigaban nuestras cosas, los muebles... 4El conjunto habitacional Presidente Sarmiento comenzó a construirse en 1968, para realojar a los habitantes ya instalados en el asentamiento anterior, las llamadas “casitas transitorias” que fueron construidas previamente en un extremo del terreno y que debían ser destruidas cuando Morón: de la erradicación de villas a la construcción de un barrioBreve historia de los barrios Presidente Sarmiento y Carlos Gardel
image/svg+xml37fnalizara la edifcación de los monoblocks.Para esta etapa de transición entre 1968 y 1973, el Plan de Erradicación de Villas preveía el trabajo de asistentes sociales con los recién llegados. El objetivo era crear lazos comunitarios entre los nuevos vecinos y prepararlos para la adaptación que suponía la adopción de patrones de vida “civilizados”.5Gran parte de los vecinos que se asentaron en la zona eran migrantes internos que habían llegado a la provincia de Buenos Aires unos años antes provenientes de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Chaco, Tucumán e incluso de países limítrofes, instalándose precariamente en barrios de emergencia o villas en el Gran Buenos Aires. Así las asistentes sociales se conectaron cotidianamente con los vecinos quienes comenzaron a conocerse y a compartir sus historias y necesidades. Entre los recién llegados se las recuerda con estima: Te decían cómo manejarse en las casas... Yo le merezco de parte mía para con ellas, el respeto, porque primero nosotros teníamos miedo hasta de hablar. Y sin embargo ellas empezaron a entrar, a tomar mate, a contarle... De ellas hemos aprendido un montón. Te puedo nombrar ya te digo: Azucena, Blanca Brites, Bety Bogani, teníamos a Miguel que era el esposo de Bety Bogani y muchos más que no me acuerdo los nombres. Pero cada manzana tenía su representante, el delegado y su asistente social.6Durante los primeros años de asentamiento en el barrio hubo una gran participación de los vecinos en distintas actividades e iniciativas, las que fueron conformando lazos comunitarios. Cada monoblock tenía su administración, se cobraban las expensas para el mantenimiento de los edifcios y los espacios comunes, y hasta competían entre ellos por su estado de conservación. En estos primeros años la situación socioeconómica y habitacional de ambos barrios se mantuvo dentro de parámetros estables, la población en general pertenecía a la clase trabajadora: los varones trabajaban en la construcción y muchos eran obreros en fábricas metalúrgicas y textiles de la zona.Resueltos los primeros inconvenientes del acondicionamiento de los inmuebles, la comisión vecinal se mantuvo muy activa en todas las necesidades que iban apareciendo. Así se organizó una escuela de alfabetización para adultos. El objetivo de esta institución fue brindar la oportunidad de completar los estudios durante esta etapa de transición, fue un espacio de reunión para organizar festejos comunitarios. Con posterioridad desapareció. También se llevó a cabo un gran festejo, apoyado por la Municipalidad, al cumplirse el primer año del barrio Carlos Gardel, como recuerda este testimonio:(...) El primer año hicimos un fogón criollo. La misma gente que fuimos radicada de todos lados, se invitó a bailar en la escuela. Se bailó el pericón nacional, muy lindo, muy importante. Payábamos con guitarra. Hicimos teatro mudo. Como el administrador se reunía con nosotros, charlaba, nos enseñaba cosas. Nos propuso festejar el año y salió bueno. Así sucesivamente nos fuimos conociendo quiénes eran unos y quiénes éramos otros.Otros proyectos fueron concretándose a partir de las necesidades del barrio: una farmacia gratuita donde con la coordinación de un profesional los vecinos podían recibir medicamentos gratuitos; la guardería, que surgió por iniciativa de un grupo de madres del barrio solidarizadas con la situación de hombres y mujeres que debían salir a trabajar diariamente y tenían el inconveniente del cuidado de los niños.Otra experiencia gestionada por la misma comisión fue la entrega y regularización de los documentos personales de los vecinos. Se formó Autoras Mariela Canali y Mariela RamettaInstituto y Archivo Histórico de MorónMorón: de la erradicación de villas a la construcción ...La erradicación de las villas supuso el desalojo por medio de tratos violentos, el traslado de las personas, y de las escasas pertenencias que alcanzaban a rescatar, en camiones del Ejército; todo lo que no podían llevarse era quemado y aplastado por las topadoras.
image/svg+xml38también el Club de Madres reconocidas como una entidad no estatal con el apoyo de Desarrollo Social, funcionaba en la escuela de alfabetización donde se habían instalado seis máquinas de coser donadas por el Ministerio. Allí se reunían las señoras cuyo trabajo se muestra en estas palabras de una de las participantes: Qué función hacíamos nosotras, salíamos las mamás a pedir telas para sábanas, para toallas, zapatillas y todo con la tarjetita, siempre tuvimos y se le daba a la gente que realmente no se podía comprar... Lo mismo que los delantales. Acá hay muchas madres que fabricamos delantales para el colegio.Durante estos primeros años funcionó además un grupo de teatro y de títeres, se organizaban torneos de truco y para las festas patrias algunas vecinas salían a vender empanadas dentro del barrio, vestidas de paisanas con trajes confeccionados para la ocasión. El trabajo social con los nuevos vecinos incluyó un Operativo de Salud, que planteó el trabajo con el Hospital Posadas. Los representantes del barrio concurrían al policlínico y se reunían con los médicos planteando los problemas y necesidades de la comunidad. Esta labor tendía a la prevención y a la atención primaria. Cristina, asistente social del hospital, cuenta que:Una de las cuestiones fue la formación de agentes sanitarios. El equipo de acá (del Posadas)estaba formado por ginecología, clínica médica, servicio social, nutrición... se preparaban en conjunto junto con los vecinos del barrio el programa a brindar... y esto se hacía con los vecinos que ellos elegían de cada manzana. Nosotros íbamos al barrio a dar charlas y a su vez ellos, terminada la capacitación, la reproducían con sus vecinos de la manzana... los vecinos podían estar capacitados en nutrición, en primeros auxilios... los conocimientos necesarios para resolver las cuestiones prácticas... y fundamentalmente todo lo que tenía que ver con la promoción de la salud, que era el eje que nos atravesaba en ese momento, que era adquirir mejor calidad de vida.7El Hospital además de un centro de salud era para el barrio un centro comunitario, en su aula magna se proyectaban películas infantiles para festejar el día del niño; Susana, militante del barrio recuerda en este sentido:El Hospital era abierto, no había ningún muro, la gente los sábados y domingos iba a hacer el picnic al parque del hospital... era como una plaza pública, hacer el picnic, tomar mate, jugar a la pelota, era un clima bueno con el Hospital. Se hacían tareas recreativas.8La adquisición de los departamentos definitivos. Los primeros años del barrio Presidente Sarmiento. La ocupación del barrio Carlos GardelEntre los años 1972 y 1973, en el complejo Presidente Sarmiento se construyeron 1200 viviendas distribuidas en 31 monoblocks, aunque el proyecto no se concluyó y quedó truncado el acondicionamiento de estos espacios centrales para el esparcimiento y juego. Gran parte de los vecinos del barrio Carlos Gardel se trasladaron de las casas transitorias a los departamentos, que contaban con unidades de 2 y 4 dormitorios. La ocupación de estas nuevas viviendas es un proceso confuso ya que por un lado muchos de los habitantes del NHT Carlos Gardel, como estaba previsto, se trasladaron a los monoblocks. Mientras que otros testimonios aclaran que los monoblocks fueron usurpados y que el accionar policial y militar no logró solucionar esta situación irregular, por lo tanto muchas familias quedaron viviendo en el núcleo transitorio. Se vivieron situaciones violentas donde la policía y los militares revisaban constantemente por la noche a los vecinos con el objetivo de sacar a los usurpadores. Varios testimonios coinciden en defnir como “copamientos” la usurpación de los departamentos. Una de las ocupantes de los monoblocks, junto con su madre que era militante peronista y hoy permanece desaparecida, recuerda cómo se organizaron para tomar ese núcleo habitacional:Se vivieron situaciones vio-lentas donde la policía y los militares revisaban constantemen-te por la noche a los vecinos con el objetivo de sacar a los usurpado-res. Varios testimonios coinciden en definir como “copamientos”la usurpación de los departamentos.
image/svg+xml39Año de 1973, gana el peronismo el 11 de marzo. Entonces a mi mamá la vienen a ver de todos los barrios donde a ella la conocían por su militancia, la vienen a ver “Cecilia, queremos tomar los monoblocks. Vos tenés que ayudarnos”. Los monoblocks estaban deshabitados (…) se discute qué conviene o no. La cuestión es que se decide tomar los monoblocks. Y se inician las tomas simultáneas. Hay tres intentos de tomas, en la primera nos saca el Ejército, porque estaba el Ejército todavía. Decidimos esperar y en agosto del 73 se toman todos los monoblocks. Además de Ciudadela y Carlos Gardel se toman los de Crovara, ya después se generaliza. Así pasamos a vivir allí. Los departamentos estaban deshabitados. Había alguno que otro que estaba adjudicado por el Banco Hipotecario, y bueno, el tema era después cómo regularizar esa situación. Estábamos ante un gobierno peronista, nos había permitido ocupar los departamentos, pero la idea no era quedarnos así porque éramos intrusos, éramos ilegales. Y bueno, ahí comienza el tema de la organización. Se organiza un grupo de delegados: un representante por escalera y un delegado por monoblock. Y se forma la comisión del barrio y con esa comisión se va a representar al Banco Hipotecario Nacional, a exigir la regularización de las viviendas, porque queríamos que nos hicieran un boleto porque queríamos pagar… Se fue al Ministerio de Bienestar Social, en micros, en camiones, hubo que presionar. Mandaron una comisión de asistente social, delegado del Banco Hipotecario al barrio, legalizaron la comisión que ya estaba conformada. Identifcaron a los representantes entre los que estaba mi mamá y se nos facilitó toda la documentación, nosotros mismos nos ocupamos del censo familia por familia, elevamos al Banco toda la documentación y ellos fueron citando y regularizando uno por uno la situación… Cuando había algún problema se reunían las comisiones de los dos barrios o decían: “hay que convocar una asamblea de delegados por tal o cual problema”. O por el agua, o por las cloacas, o que fuese. Se trabajaba en conjunto.9Mientras tanto las “casitas transitorias” continuaron albergando a las familias ya asentadas y a las nuevas que iban llegando a asentarse. Los años de la dictadura militarPocos años después de entregados los departamentos, el barrio tomó contacto con la política violenta del gobierno de Isabel Perón y de la última dictadura militar. Paralelamente a la represión que se llevaba a cabo dentro del Hospital Posadas, con la detención, tortura y desaparición de trabajadores, médicos y personal del hospital, las Fuerzas Armadas avanzaron sobre los barrios Carlos Gardel y Presidente Sarmiento, que en ese entonces se denominaba Mariano Pujadas. Después del golpe se desarticuló la organización barrial utilizando medidas de intimidación. El barrio estaba militarizado, se realizaban operativos, hasta con helicópteros y varios vecinos, militantes de distintas tendencias, fueron secuestrados y desaparecidos, incluso el monolito que recordaba al militante asesinado en Trelew fue dinamitado según el testimonio de los vecinos:Le pusieron una bomba y después hacen un escape de gas, tiran gas, un camión, que nosotros creíamos que se fundía el mundo. Corríamos a cerrar las ventanas porque empezaron a tirar gases lacrimógenos desde un camión, al otro día que desaparece el monolito, llegó un camión con soldados.La vida cotidiana del barrio se transformó, la desmovilización de la población se hizo evidente, los festejos organizados en años anteriores dejaron de realizarse, las comisiones para el mantenimiento se deshicieron, ya que la administración general del barrio estaba en manos de un militar junto a una asistente social, y comenzaron a emplazar a los habitantes que estaban atrasados con las expensas, se llegó hasta el desalojo forzado de las viviendas.Otra de las situaciones vividas en esos años fue el intento de desalojo con el objetivo de erradicar el barrio. En julio de 1979 la Secretaría de Bienestar Social municipal, a cargo del vicecomodoro Eduardo Raúl Galvazzi, informa a 640 familias del barrio Carlos Gardel que debían desalojar sus viviendas en el plazo de 90 días. El informe –aparecido en el diario Clarínen agosto de ese año– explicaba que esta política abrupta se basaba en una investigación realizada por el servicio social que había detectado “intrusos, gente de mal vivir, inadaptados sociales, ejercicio de la prostitución, vagancia, falta de cooperación y colaboración comunitaria, apatía, carencia de hábitos laborales y de afán de progreso y superación…”
image/svg+xml40Fueron varias las voces que se levantaron contra esta amenaza, algunos de los reclamos vecinales fueron publicados en distintos medios, sobre todo destacando que muchos de los habitantes eran gente de trabajo, uno de esos testimonios expresa que: “Podemos decir que se nos persigue, se nos hostiga desde hace mucho tiempo, quieren echarnosde cualquier manera y ahora han elegido la cédula de desalojo… somos gente de paz… pero vamos a defender el derecho a tener techo, aunque sea precario. Trataremos de apelar al presidente de la República… para que cuatro mil argentinos no queden en la calle, con sus hijos y sus cuatro trapos en brazos…”.10Ante esta situación los vecinos expresaban: “…Tenemos miedo de dar los nombres porque ya nos han amenazado debido a otras notas en las que denunciábamos el desalojo. Pero no podemos quedarnos callados, nos parece muy injusto que además de sacarnos de aquí se hable de nosotros acusándonos de ser gente de mal vivir, intrusos inadaptados sociales, delincuentes, prostitutas, vagos.”La violenta e injusta situación del desalojo produjo la reacción del padre José María Riega, a cargo de la capilla del barrio, quien le informaba al obispo de Morón, monseñor Raspanti: “… ¿quién puede en tres meses hacerse una casa aunque tenga un lote?… La notifcación es escueta y anuncia únicamente el desalojo a todas las familias por igual. No hay ninguna explicación del porqué de la medida y de la urgencia del desalojo ni ninguna cláusula que abra un poquito de luz al porvenir de las familias… La decisión es aún más llamativa y desconcertante si se tiene en cuenta que el barrio Carlos Gardel no es una villa de emergencia, aunque se le conozca como tal… Es un barrio organizado. Bien dispuestas y distribuidas las viviendas en 40 manzanas, con un patiecito individual al frente. Disponiendo en su interior de baño y agua corriente. Casi todas las casitas tienen alguna planta y un árbol… Si uno entrara sin prejuicios en el barrio (pensando por ejemplo como muchos que a la vuelta de la manzana lo van a asaltar) no le disgustaría. Es familiar y hasta agradable, más sin duda que la forma de vida de los monoblocks de al lado. Es cierto que no todo es lindo en el barrio: uno puede encontrar fácilmente signos de abandono, basura que no es recogida por el camión, aguas servidas… Pero no se entenderán bien las causas culpando a la gente de apatía y suciedad, si no se tiene en cuenta que el barrio tiene una administración dependiente del Ministerio de Bienestar Social de la Nación con empleados y que, por lo menos en estos dos últimos años, no se le ha dado a la gente una responsabilidad en la administración… Aunque es un barrio y no una villa en el que se podría seguir viviendo aún dentro de la estrechez y precariedad de las viviendas… no puedo aprobar ni apoyar una decisión de desalojo, que presiona innecesariamente a las personas sin sensibilidad humana”.Luego de unos días completa su carta con un informe de los últimos sucesos, donde nuevamente se ve la aplicación de las políticas represivas: “Un día (dentro de este breve lapso de tiempo que se le ha dado a la gente para que busque vivienda) amaneció el barrio rodeado por la policía. Más de cien, con patrulleros, colectivos, con perros, a caballo. Algo espectacular. No se podía entrar ni salir del barrio… Así hasta cerca del mediodía. Censaron todas las casas y se llevaron mucha gente, varios colectivos. Después de averiguaciones en Hurlingham, los fueron soltando a lo largo de ese día. En la misma administración del barrio he sabido que a algunos todavía no los soltaron. Pero no tengo datos de ello…”Después de esta difícil situación fnalmente esta política de “Erradicación de la Villa de Emergencia Carlos Gardel” del gobierno militar instalado en el Municipio, no fue llevada a cabo, por lo menos en su totalidad.Las décadas de 1980 y 1990: decadencia habitacional y crecimiento demográfico de ambos barriosLa expansión del barrio Carlos Gardel se encuadra dentro del avance de las crisis económicas que afectaron la economía nacional en la década del 80 y más específcamente en la década del 90. Sus conocidas consecuencias fueron el alto nivel de desempleo, la pauperización social y el aumento pronunciado de la pobreza y la indigencia.Los núcleos habitacionales transitorios (NHT), aunque contaban con cloacas y servicios básicos, no habían sido construidos para ser defnitivos y empezaron a mostrar importantes deterioros. Así el barrio comenzó a cambiar su fsonomía y el
image/svg+xml41hacinamiento se hizo evidente, ya que la llegada de nuevos pobladores y el crecimiento de las familias originales llevaron a ocupar los espacios vacíos con viviendas precarias. La crisis también afectó al barrio Presidente Sarmiento. En la década del 90 el desmejoramiento de los monoblocks se vuelve patente como consecuencia de la difcultad económica para mantener los edifcios, la decadencia en la administración e incluso los problemas de recolección de los residuos. Esto se combinó con la usurpación y casos de “subalquileres”. Pero la pauperización social y el aumento de la pobreza durante la década de 1990 no solo afectó el estado edilicio de ambos barrios. Entre 1995 y el año 2003 se produjo el avance de la crisis económica y el desempleo. Esto tuvo consecuencias claras para los habitantes de ambos barrios sobre todo en cuanto al aumento de la violencia y las prácticas ilegales.Para la misma época el Estado provincial comenzó a promocionar los planes sociales. En algunos casos las prácticas políticas corruptas utilizaron la necesidad extrema y la falta de posibilidades de trabajo para negociar dichos planes. Otro de los problemas que recrudeció en ambos barrios fue la delincuencia: se formaron “bandas” de chicos jóvenes que se enfrentaban entre sí. Parte del barrio se transformó en un desarmaderode autos y aguantaderode delincuentes, aprovechando la conformación espacial, que impide y difculta el ingreso de las fuerzas de seguridad. La decadencia de las organizaciones internas del barrio y la proliferación de redes mafosas, colaboró con el libre desempeño de estos grupos.11Los mismos vecinos reconocen que la convivencia con la violencia y la delincuencia empeoró la situación social, y llevó al prejuicio “del afuera” ya que sobre ambos barrios se generó la imagen de una zona negra y violenta y llevó a generalizarlos con la denominación de Villa Carlos Gardel. La discriminación se muestra en el rechazo al pedir empleo y en las sospechas de las poblaciones cercanas de El Palomar y Villa Sarmiento, como dice un vecino que en la década del 90 accedió a un plan social de la provincia: Me mandaron a barrer como a quince cuadras de acá. Y salió una señora y me saluda: “Yo soy del plan bonaerense”, le digo y me pregunta: “¿Dónde vivís?” “En el barrio Gardel” ¡Corrió para adentro y cerró la puerta! Fue y es esta la causa de la caída de la matrícula de las Escuelas 104 y 109 porque los mismos vecinos del barrio eligen enviar a sus hijos a escuelas fuera de la zona. La última décadaLa crisis que se generó en los años 2001 y 2002 produjo una situación de extrema necesidad en los barrios, la mayoría de las familias se encuentra en condiciones de pobreza. Más de la mitad de la población además se ubica cercana a la línea de indigencia. La pobreza también se ve refejada en el área circundante, como en el caso de la villa de emergencia conocida con el nombre de Villa de los Paraguayos.En la actualidad dentro del barrio Carlos Gardel “(…) estimamos que la población fja del barrio ronda los 7000 habitantes. Se debe entender que la movilidad de personas es muy grande, llegando a calcular otras fuentes entre 10.000 y 15.000 habitantes. Un dato para destacar en la estructura poblacional es que casi el 40% de la población se ubica entre los 0 y los 13 años. La otra gran franja etaria se encuentra entre los 21 y los 60 años, también con un 40% de población. Es fundamental para este análisis detectar que existe la misma cantidad de niños en plena edad de desarrollo que personas en edad económicamente activa”.12Durante los últimos años los planes de asistencia y desarrollo social, municipales, provinciales o nacionales alcanzaron al 45% de la población. En el barrio también aparecieron comedores subvencionados por el Municipio o Cáritas, ferias semanales de frutas y verduras La expansión del barrio Car-los Gardel se encuadra dentro del avance de las crisis econó-micas que afectaron la economía nacional en la década del 80 y más específicamente en la década del 90. Sus conocidas consecuencias fueron el alto nivel de desempleo, la pauperización social y el aumen-to pronunciado de la pobreza y la indigencia.
image/svg+xml42y roperos comunitarios. También aparecieron numerosos pequeños negocios en los monoblocks y dentro de las viviendas “transitorias” como una nueva alternativa ya que los vecinos no se trasladan muy lejos para conseguir los productos básicos de la vida diaria. A fnes del año 2004 luego de corroborar que no se había realizado intervención alguna sobre estos NHT se traspasó el dominio de la tierra al Municipio de Morón, actual propietario y responsable. A principios del año siguiente se implementó desde el gobierno nacional el Plan federal de Viviendas y el subprograma de Urbanización de Villas de Emergencia y Asentamientos precarios. En particular para el Municipio de Morón se incorporó al barrio Carlos Gardel (los NHT ahora de propiedad municipal), lo cual abrió la posibilidad de concretar un trabajo de radicación y nueva urbanización que mejore la calidad de vida de la población. Para urbanizar la zona se consiguió la cesión de los terrenos disponibles tras el Hospital para reubicar 430 familias de este barrio. Las casas serán construidas por el Plan Federal de Viviendas y asignadas a los habitantes de los NHT con una hipoteca a largo plazo, los mismos benefciarios trabajan en la construcción de sus casas. Aquellos que no contaban con los conocimientos básicos pudieron aprender y lo siguen haciendo en talleres organizados por el Municipio (Taller de Capacitación en Construcciones del Programa de Prevención Comunitaria articulado por Defensa Civil del Municipio).Analizando la recopilación de actividades e informes sobre las distintas instituciones y proyectos pareciera que se dejan atrás los años en que reinaba la desorganización. Existen varios proyectos culturales municipales como los talleres de manualidades y ofcios, la murga “los Gardelitos” o el proyecto nacional de la Orquesta del Barrio para los chicos. Otros proyectos son el Programa de Prevención Comunitaria donde se trabaja con jóvenes en conficto con la justicia a través de un programa nacional articulado por la Dirección de Defensa Civil del Municipio, con el objetivo de insertarlos laboralmente. Los vecinos reconocen este principio de cambio y se mantienen a la expectativa de una nueva etapa esperada y deseada cuyo eje es la actual construcción de las viviendas defnitivas para los habitantes del barrio Carlos Gardel. Comentan entonces la vuelta de la murga al barrio y la exitosa invitación a murgas de otros barrios que fueron festejadas por todos los habitantes. Las esperanzas están puestas en esta nueva etapa de construcción y futuro acceso a una vivienda digna, a un barrio con calles abiertas a las que entre todos les ponen nombre, pero sobre todo a la gran oportunidad de trabajar. Igualmente estos hombres y jóvenes se mantienen alertas, saben que la obra no es para siempre y esperan poder insertarse en otros trabajos similares en base a la experiencia adquirida.Y... yo a veces me pregunto, y le pido a Dios que al país le vaya siempre bien, porque qué va a ser de nosotros si nos discriminan a todos. Es como que nos tiran a la cancha para que hagas alguna macana y al fn y al cabo los únicos perjudicados son los chicos acá... El día que se acabe esto, ojalá que nosotros tengamos la oportunidad de trabajar en otro lado. Nosotros sabemos que nos va a pasar eso. Todo el barrio sabe que va a pasar eso, de los que trabajamos ahí. Nosotros nos juntamos y hablamos todo y sabemos que el día que se acabe eso... vamos a tener que seguir caminando.NOTAS1 En el caso que nos ocupa el NHT corresponde al barrio Carlos Gardel o “las Casitas” como las denominan sus habitantes.2Los monoblocks conforman el barrio Presidente Sarmiento.3Patricia Dávalos, Marcela Jabbaz, Estela Molina, Movimiento villero y estado (1966-1976), CEAL, 1987.4Entrevista a Francisca, 2006.5Patricia Dávalos y otros, op. cit.6Entrevista a Adelaida López, 2006.7 MarianoÁlvarez, “Esperanzas caminando. El Posadas: una experiencia de movilización y participación social en la Argentina de los 70”, en Voces RecobradasNº 18, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, agosto de 2004.8 Álvarez Mariano, op. cit.9Álvarez Mariano, op. cit.10Diario Crónica,agosto de 1979.11Arq. Leonardo Rodrigo. Barrios Carlos Gardel y Presidente Sarmiento. Propuesta de recuperación urbana. Agosto 2004 - febrero 2005.12Arq. Leonardo Rodrigo, op. cit.
image/svg+xml43Morón: da erradicação de favelas à construção de um bairro. Breve historia dos bairros Presidente Sarmiento e Carlos GardelMariela CanaliMariela Rametta O artigo percorre a história dos bairros Presidente Sarmiento e Carlos Gardel que surgiram como parte do Plano de Erradica-ção de favelas de 1968 e assim, enquanto que as famílias beneficiárias do plano viviam nos núcleos residenciais transitó-rios, eram construídos os monoblocos do primeiro bairro. De um começo os vizinhos organizaram comissões para a manutenção de ambos os bairros, apoiados na solidariedade e nas necessidades emergentes. Mas, a partir da época da ditadura, a vida cotidiana trocou pela desmobilização da população. As sucessivas crises econômicas agravaram a situação social e residencial, e esta crise geral não foi atendida pelas políticas do Estado, chegando a uma situação de emergência.Desde 2001 o Plano Federal de Vivendas abriu a possibilidade de concretizar um tra-balho de nova urbanização para melhorar a qualidade de vida da população. As novas vivendas –em cuja construção participaram os mesmos beneficiários– começaram a ser entregadas em dezembro de 2006. A isto é adicionado projetos culturais muni-cipais.Neste contexto de transformações para os habitantes, a experiência do resgate da me-mória dos vizinhos permite refletir sobre a prática da história oral como ferramenta significativa do afazer histórico. Morón : De l’éradication de bidonvilles à la construc-tion d’un quartier. Brève histoire des quartiers Presidente Sarmiento et Carlos GardelMariela CanaliMariela Rametta Dans cet article on retrouve l’histoire des quartiers Presidente Sarmiento et Car-los Gardel. Ils ont surgi à partir du Plan d’éradication de bidonvilles à 1968. Ainsi, tandis que les familles bénéficiaires du plan vivaient dans des logements transitoires, on construisait les monoblocs du premier quartier. Dès le début les voisins ont organisé des commissions pour l’entretien des deux quartiers, ayant comme base la solidarité et la réponse à toutes les nécessités émer-gentes. Cependant, à partir de la dictature, la vie quotidienne a beaucoup changé à cause de la démobilisation de la population. Les successives crises économiques ont aggravé la situation sociale et du logement. Cette détérioration générale n’a pas été prise en compte par les politiques d’État et on est arrivé, avec les années, à une situation d’émergence absolue.Depuis 2001 le Plan Fédéral de Logements a ouvert la possibilité d’aboutir une nouvelle urbanisation pour améliorer la qualité de vie de la population. Les nouveaux logements – qui ont été construits avec la participation des mêmes bénéficiaires - ont commencé à être livrés en décembre 2006. Il faut ajouter l’existence des projets culturels municipaux. Dans ce contexte de transformations à faveur des habitants, l’expérience du sauvetage de la mémoire des voisins nous permet de réfléchir à propos de la pratique de l’histoire orale comme un outil très significatif en ce qui concerne le travail historique.Morón: from the shacks eradication to the building of a neighborhood. Brief history of the President Sarmiento and Carlos Gardel neighborhoodsMariela CanaliMariela Rametta This article goes through neighborhoods President Sarmiento and Carlos Gardel’s his-tories which got arise like part of Eradication of Shacks Plan in 1968 so, while the families that were beneficiaries of this plan lived in transitory housing conditions, the first block of buildings were constructed.The neighbors organized maintenance com-missions to both neighborhoods from the very beginning, these were based in solidarity and to arise from the need to live there. But the life changed during the military dictator-ship because of demobilization of people. The consecutive economical crises got worse the social and resident situation and this deterio-ration wasn’t contemplated by the Govern-ment, increasing the state of emergency.Since 2001 the Federal Plan of Housing opened possibilities doing a new urbanization to improve the life’s quality of people. The new houses –of which construction the same neighbors participated– begun to delivering up at December of 2002, adding municipal cultural projects.In this context of transformations to the peo-ple, the rescue of neighbors memory allows us to reflect about the practice of oral history like a significant tool for historical task.43