image/svg+xml
Voces Recobradas
34
Voces Recobradas
34
1. Introducción
Son muy pocos los estudios sobre “historia de los ba-
rrios” realizados en San Miguel de Tucumán y demás
ciudades de la provincia homónima. Y los profesio-
nales que encaran la investigación de este tema, en
su mayoría, no son historiadores de carrera. Si bien
aparecieron numerosos aficionados que han realiza-
do la importante actividad de preservar los recuer-
dos barriales, fueron los arquitectos quienes, por
conocer los distintos procesos históricos referidos a
la urbanización, comenzaron a investigar las trans-
formaciones de la ciudad. En el caso de la ciencia
histórica, ciertos cientistas tucumanos, vinculados
a la “historia tradicional”, han desarrollado sus in-
vestigaciones desde la visión decimonónica de la po-
lítica: grandes hombres, grandes obras de gobierno.
Una aproximación
a la construcción
de la historia
del Barrio Sur
San Miguel de Tucumán,
1945-2000
Gustavo Cortés
Navarro
UNT- P.I. CIUNSa N°
1.804 - AHONA
1
En esas acciones gubernamentales sólo se narraron
los adelantos “materialistas” (en el uso cotidiano del
concepto) en obras que han “modernizado” la ciudad
sin observar qué resultados sociales, políticos, eco-
nómicos o culturales hayan sido beneficiosos o no
para la sociedad tucumana.
Desde nuestra visión, el estudio de la “historia
de los barrios” (la cual se encuentra metodológica-
mente más cercana a la concepción marxista de la
“Historia desde abajo”, iniciada por el historiador
inglés Edward Palmer Thompson, como de la Mi-
crohistoria italiana de Carlo Ginzburg) es de suma
importancia para entender el desarrollo de los secto-
res populares y su relación con la sociedad en la que
viven En este sentido, empieza a tener valor tanto la
recuperación de los espacios sociales públicos “pe-
image/svg+xml
35
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
35
queños” (comercios, bares, cines, clubes deportivos,
instituciones educativas, etc.), así como también la
identidad de un nuevo actor histórico: “el vecino”.
Esta temática investigativa, que se basa en muchos
casos en problemáticas aún sin resolución, intenta
encontrar interpretaciones alternativas que puedan
posibilitar soluciones a los problemas existentes que
viven los vecinos. Es por ello que la Historia Oral
2
no sólo ayuda a la recuperación y conservación de la
memoria del vecindario sino también es fundamen-
tal para construir el pasado reciente del Barrio.
Para que la HO tenga su efecto superador frente
al lector que busca una nueva mirada de los procesos
históricos, es importante el estudio de la memoria
histórica. Barela, Miguez y García Conde concuer-
dan que
“la memoria es la capacidad de conservar determi-
nadas informaciones y remite un complejo de fun-
ciones psíquicas con el auxilio de las cuales el hom-
bre está en condiciones de actualizar impresiones e
informaciones del pasado, de comprender y de pro-
ducir ideas, transmitir experiencias y definirse a sí
mismo, es decir intervenir en el proceso social”.
3
La memoria como categoría de análisis puede ser
utilizada como herramienta teórico-metodológica
de distintas disciplinas y áreas de trabajo. Como ca-
tegoría social se refiere a distintos actores y sus usos
que abarcan lo social, lo político, y las conceptuali-
dades y creencias del sentido común. Cuando el aná-
lisis tiene que ver con una problemática social, con
varios protagonistas de un proceso histórico que es
común a dichos actores históricos, aparece la memo-
ria colectiva no sólo para tomarla como objeto de es-
tudio sino también para aportar nuevas fuentes que
permitan construir, sobre todo, la historia reciente
de las sociedades contemporáneas.
La memoria colectiva es fundamental para
las investigaciones de la HO. Sabemos que cuando
el hombre habla, lo hace como sujeto individual y
como sujeto colectivo, entonces crea y transmite sus
recuerdos, lo hace en doble condición. El recuerdo
colectivo presupone y se expresa sólo a partir del re-
cuerdo individual. Sin la presencia de ambos resul-
ta impensable la formación de conciencia y, por lo
tanto, de la memoria colectiva histórica. La memoria
colectiva es un conjunto de memorias compartidas.
Lo colectivo de las memorias es el entretejido de tra-
diciones y memorias individuales, con alguna orga-
nización social y una estructura dada por códigos
culturales compartidos.
Es primordial para nosotros la recuperación de
la memoria colectiva y la creación de las fuentes his-
tóricas orales como una manera de poseer una visión
novedosa (siempre subjetiva) de la historia. La HO
se vuelve elemental no sólo por crear fuentes don-
de los antecedentes escritos no existen sino también
en preservar los
milieux
de mémoire
(entornos de la
memoria)
como llamó Pierre Nora a los verdaderos
ambientes de la memoria en contraposición de los
lieux
de mémoire
(lugares de la memoria) las cuales
son memorias representadas en monumentos, pro-
cesos de museización de edificios con un significado
histórico o la conmemoración de algún día con con-
notaciones especiales (por ejemplo el día 24 de Mar-
zo “Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia”)
4
.
En este sentido, tomando al “Barrio” como objeto de
estudio, este espacio geográfico se transforma en
mi-
lieux de mémoire
donde el actor social de importan-
cia es el vecino, quien nos representa con su palabra
la “historia inmediata” a una parte de la ciudad a la
que hay que resguardar su memoria.
Por lo expuesto anteriormente, el objetivo de
nuestra investigación es construir, desde la memoria
de los vecinos, la evolución del Barrio Sur, realizando
una periodización −si bien la misma es flexible para
unos años anteriores y posteriores− de 1950 a 2000.
Para lograr este cometido, hemos realizado con los
alumnos de la “Escuela Secundaria Congreso de Tu-
cumán” un trabajo de campo previo, recorriendo los
alrededores del edificio del establecimiento, contac-
tándose con la realidad de los vecinos. Como proble-
mática nos planteamos los siguientes interrogantes:
¿Cuál fue la evolución social, económica y urbanís-
tica que posibilitó la transformación del Barrio Sur?
¿Cómo vivieron los vecinos los diferentes procesos
políticos desde 1950 hasta el año 2000? ¿Cuáles son
los problemas emergentes que preocupan y aún no
tienen solución?
Cabe señalar que nuestra idea de trabajo con-
siste en demostrar que la evolución urbanística y
económica de la ciudad ha obligado a una trans-
formación del Barrio Sur en parte del Microcentro
image/svg+xml
Voces Recobradas
36
Voces Recobradas
36
tucumano. Para ello comenzaremos analizando una
serie de trabajos que nos puedan representar la im-
portancia de la evolución de los barrios y de la ciu-
dad misma, con el fin de detenernos en el análisis de
la memoria barrial.
2. Estado de la cuestión
“Hace ya una década y media que Dora Schwarzstein
estableció el Programa de Historia Oral en la Univer-
sidad de Buenos Aires. Si bien debemos destacar el
trabajo pionero de Hebe Clementi, en aquel entonces
poca gente se dedicaba a esta rama de la disciplina
histórica. Por un lado estaba la misma Dora que, con
Pablo Yankelevich, Patricia Funes y María Caldera-
ri, armó el proyecto de la historia oral de la UBA.
Por otro lado se encontraban Ernesto Salas y el que
subscribe que se dedicaban a la historia obrera post
1955. Finalmente, Liliana Barela y el
Instituto Histórico de la Ciudad
de Buenos Aires habían realizado
varias investigaciones, siendo la
más destacada, e importante por
su impacto social, la historia oral
de los barrios de Buenos Aires.
En realidad, en aquel enton-
ces, pocos colegas aceptaban la His-
toria Oral como un método de investigación por sus
vínculos con la subjetividad. En ese sentido Dora lo-
gró que el Programa, y la labor de sus investigadores,
tuvieran una aceptación en el mundillo académico
que fue fundamental para su desarrollo posterior.
Hoy los practicantes de la historia oral somos mu-
chos, como lo demuestra la fundación hace ya dos
años de la Asociación de Historia Oral de la Repú-
blica Argentina.”
5
En Buenos Aires, en la década del 80 se inician los
primeros estudios de HO. Dora Schwarzstein y Hebe
Clementi fueron las iniciadoras de una tradición
académica pionera en el rescate de la memoria de los
vecinos de la ciudad capital argentina. Con el Pro-
grama de Historia Oral de la Universidad de Buenos
Aires se da un fuerte impulso para el estudio de las
fuentes orales en el país. El Instituto Histórico de la
Ciudad de Buenos Aires fue una de las instituciones
que inicia la recuperación de la memoria de los ba-
rrios porteños:
“(…) las primeras experiencias en HO del Insti-
tuto Histórico datan de 1985. En ese año se realiza-
ron talleres de HO en diferentes barrios de la ciudad.
Previamente a esta iniciativa se había llevado a cabo
un ciclo denominado ‘Los abuelos cuentan la histo-
ria’, que consistió en una serie de reuniones realiza-
das con ancianos del Hogar Rawson y a las que con-
currían alumnos del séptimo grado de los colegios
municipales de la zona (…)”
6
Los primeros trabajos sobre historia de los barrios
fueron reflejados en el libro
Barrio y Memoria
7
en
el cual se publicaron todas las actividades realiza-
das en los talleres barriales de Reflexión de Histo-
ria Oral Colectiva de Capital Federal. La prolífera
obra de Hebe Clementi fue fundamental para dar
un fuerte impulso al desarrollo académico de la HO.
“Yo, italiana. Historias de vida de
mujeres inmigrantes”, “La esta-
ción Retiro. Algunas precisiones
sobre los inmigrantes de países
limítrofes”
8
, entre otros numero-
sos trabajos, fueron parte de la
obra de Clementi para el desarro-
llo reflexivo en lo que respecta a
la problemática barrial. Las revis-
tas específicas de HO como
Voces Recobradas
(de la
Dirección General Patrimonio e Instituto Histórico
de la Ciudad de Buenos Aires) y
Testimonios
(corres-
pondientes a la Asociación de Historia Oral de la Re-
pública Argentina –AHORA!−) son importantes en
el estudio y divulgación de investigaciones basadas
en las fuentes orales correspondientes a la historia
de los barrios. Por último, entre otras revistas espe-
cializadas encontramos la publicación
Voces al Sur.
Construcción de identidades barriales
del Instituto
Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, que fomenta
la investigación de los barrios porteños y sus proble-
mas socioeconómicos.
En el Noroeste Argentino, sobre todo en Salta,
son importantes los trabajos tanto de recuperación
de la memoria e identidad como de la evolución de
los barrios de la capital salteña realizadas por Rubén
E. Correa y su equipo de investigación. Estas activi-
dades en ateneos, clubes deportivos, centros de ter-
cera edad han posibilitado la publicación del libro
Historia de los barrios y villas de Salta
, donde Correa
En realidad, en aquel enton-
ces, pocos colegas aceptaban la
Historia Oral como un método de
investigación por sus vínculos con
la subjetividad.
image/svg+xml
37
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
37
realiza un estudio comprometido y militante en es-
tos espacios sociales, significando una nueva mane-
ra de encarar la investigación histórica en la ciudad
norteña
9
.
En lo que se refiere a los estudios barriales de
San Miguel de Tucumán, en muchos casos proponen
investigaciones referidas al crecimiento y ordena-
miento urbanístico de la ciudad. Son artículos más
relacionados a los conocimientos arquitectónicos
que a un análisis sociopolítico de los habitantes. Po-
demos nombrar el trabajo de Danila Moreno y Ana
Lia Chiarello “La ciudad de papel. Los proyectos de
avenida dentro del casco fundacional”,
10
donde, se-
gún las autoras, especialistas en urbanización tucu-
manos tomaron los modelos europeos, sobre todo
franceses, con el fin de mejorar y modernizar el cas-
co colonial de la ciudad. En este sentido, la apertu-
ra de avenidas dentro de este sector de la ciudad no
sólo desafiaba las ideas urbanísticas sino también las
ideas conservadoras dentro de Tucumán.
Otro estudio es el desarrollado por Analía Sal-
vatierra de Michel “Primeras viviendas para obreros
en la ciudad de San Miguel de Tucumán. Ubicación
en el contexto socioeconómico”.
11
Durante el go-
bierno conservador de Luis F. Nougués, se licita la
construcción de cincuenta casas con el fin de des-
poblar los conventillos existentes en la ciudad. Lo
interesante del dato histórico no es el desenlace del
proyecto (sólo se levantaron diez casas) sino el lugar
donde se construyeron los inmuebles para obreros:
en el Barrio Sur, en la zona lindante a la Plaza Bel-
grano. El concesionario de la construcción fue Ber-
nardo García Hamilton, futuro fundador del diario
La
Gaceta
, y la empresa constructora fue Bachini y Cía.,
muy conocida para los primeros años del siglo XX en
Tucumán.
Otra investigación sobre la historia de los ba-
rrios es la colección publicada por la Municipalidad
de San Miguel de Tucumán:
Memorias de los Barrios:
Hilvanando la Historia Oral y Documental de los ba-
rrios tucumanos
. Esta se inicia con la historia de “La
Ciudadela” donde su autor, Néstor Soria, realiza una
recopilación de fuentes documentales (epistolares,
fotográficas, orales, etc.). Este no presenta un aná-
lisis detallado de la sociedad, solamente la función
del libro se basa en la recuperación de las memorias
barriales. La historia de la Ciudadela, no obstante, a
pesar de nuestra crítica, no deja de ser un interesan-
te tema para mejorar en el futuro.
Un artículo de suma importancia para intro-
ducirnos a la historia de los barrios es el realizado
Mapa correspondiente a la ciudad en el año 1900. Aquí podemos
observar cómo ese espacio fundacional-colonial es secundado
por la transformación de la urbanística liberal de fines del siglo
XIX. Ambos espacios están delimitados por diferentes colores.
También se observan los adelantos en medio de transportes como
el ferrocarril o el tranvía (tramway) que circulaba por la ciudad. El
Barrio Sur y el Barrio Norte ya estaban bien delimitados. (Datos
seleccionados del Libro del Centenario de la Independencia Argen-
tina, Tucumán, 1916).
Mapa de la ciudad de San Miguel de Tucumán en el año 1816.
Si bien mantiene las características del estilo de urbanización
hispánico-colonial, para el año de la Declaración de la Indepen-
dencia podemos ver ciertos cambios realizados por los tucumanos:
por ejemplo al sudoeste el campo de las carreras y la Ciudadela,
fortaleza fundada en 1813 por el Gral. José de San Martín. (Datos
seleccionados del Libro del Centenario de la Independencia Argen-
tina, Tucumán, 1916).
image/svg+xml
Voces Recobradas
38
Voces Recobradas
38
El Paseo de los Próceres Latinoamericanos, Boulevard Gral. Juan
G. Lavalle en la actualidad. Barrio Sur, San Miguel de Tucumán.
por la arquitecta María Jerez “El Barrio Jardín de
Tucumán”
12
. En su breve, pero interesante trabajo,
Jerez analiza de manera eficiente el desarrollo del
“primer barrio planificado” de la ciudad. Si bien, en
sus primeros párrafos, nos presenta la diferenciación
entre los principales tipos de barrios, resulta impor-
tante para poder diferenciar cómo se fueron desa-
rrollando los barrios según sus necesidades y posibi-
lidades de progreso:
“(…) una ciudad está estructurada en base de ba-
rrios. Cada barrio tiene características particulares
que contribuyen en la diversidad de una ciudad. El
barrio es un indicador en la formación de la ciudad,
que queda establecido en la historia y en la memoria
de la misma”.
13
3. Breve síntesis histórica-urbanística
de la ciudad de San Miguel de Tucumán
La historia del Barrio Sur puede ser construida desde
los inicios mismos de nuestra ciudad. Sin embargo,
hubo dos movimientos urbanísticos que caracteri-
zaron el crecimiento de esta urbe. Estos movimien-
tos son conocidos como “crecimiento concéntrico”:
sobre la primera base urbana (la etapa fundacional-
colonial), con el tiempo se constituye una segunda
(la etapa liberal), lo que permite ver una transforma-
ción urbanística en la ciudad. A continuación expli-
caremos brevemente la evolución de San Miguel de
Tucumán para comprender la relación de este creci-
miento concéntrico de la ciudad.
Los gobernantes tucumanos comienzan a idear
una ciudad con un estilo similar a las grandes ciuda-
des del mundo y pronto transformaron a San Miguel
de Tucumán en una “moderna capital” del Noroeste
Plano actual del centro de la ciudad de San Miguel de Tucumán. Se encuentran representados el Microcentro; según los puntos cardinales, los
Barrios Norte y Sur. Hacia el Este, el Parque 9 de Julio, Estación de Ómnibus e Hipódromo provincial. (Folleto turístico).
image/svg+xml
39
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
39
argentino. Marcelo Beccari nos explica una nueva
etapa del crecimiento urbanístico de nuestra ciu-
dad:
(…) después cuando se amplía
queda formado un
nuevo “anillo” en la ciudad que hacia el este
coin-
cide (…) con
las Avenidas
Avellaneda- Sáenz Peña
(hacia el Este). Pero hacia el Norte
se amplía hacia
la Avenida Sarmiento;
hacia el Oeste
se amplía ha-
cia la Avenida Mitre y Alem y
hacia el sur
se amplía
hacia la Avenida Roca. Este otro sector es lo que no-
sotros llamamos el “área o sector de expansión libe-
ral”: esto quiere decir que posteriormente al proceso
fundacional-colonial de la ciudad, ya hacia fines del
1800 empieza como un segundo proce-
so de expansión de la ciudad que
tiene que ver, incluso, con otro
modelo –el modelo liberal− y que
desde el punto de vista urbano (…)
tiene otras características: las ca-
lles comienzan a ser más amplias,
tienen veredas más anchas, y están
arboladas…
14
El nuevo estilo urbanístico se ase-
meja con la moda impuesta por la burguesía triunfan-
te en Francia durante el último cuarto del siglo XIX.
Las avenidas Roca, Sarmiento, por ejemplo, tienen
características de lo que se llama
boulevard
:
(…) el boulevard tiene, como una doble vereda, una
platabanda central que en realidad era un poco más
ancha
(que las actuales)
, arbolada, donde vos circula-
bas en ambos sentidos (…) este boulevard se armaba
como un paseo. La idea era
que una persona
tenga la
idea del “paseo”
:
de ir, de volver, de mirarse, de ser
visto…
15
Estas transformaciones urbanísticas posibilitaban
una moderna manera de sociabilización ciudadana
en la ciudad de San Miguel de Tucumán. Si tomamos
como ejemplo estas ideas de
boulevard
, en la actua-
lidad, en el Barrio Sur, tema que nos compete, to-
davía se encuentra uno característico de la ciudad:
el
boulevard
General Lavalle, con un recorrido este-
oeste (desde la calle Jujuy hasta J. Bautista Alberdi).
Este
boulevard
es interesante, ya que une tres “pul-
mones” verdes de la ciudad: las plazas San Martín,
Rivadavia (frente al Hospital de Niños) contiguas
una a otra y Belgrano respectivamente.
Una vez conocida esta síntesis de la historia de
la ciudad de San Miguel de Tucumán, nos propone-
mos a realizar una aproximación a la historia del Ba-
rrio Sur.
4. El Barrio Sur en la memoria de los
vecinos
4. a. Algunos antecedentes a la división de la ciu-
dad en Norte-Sur
¿A qué sector de la ciudad llamamos Barrio Sur? ¿Y
por qué lleva ese nombre? Parece ser
que el barrio en cuestión toma esa
denominación simplemente por
su orientación cardinal (como
sucede en distintas ciudades del
país). Claro está, siempre aplican-
do como eje el paseo principal de
la ciudad, en nuestro caso, la Pla-
za Independencia. Pero el nombre
de Barrio Sur propiamente dicho
correspondería al período urba-
nístico arriba estudiado conocido como de expan-
sión liberal.
En nuestro país, la organización urbanística de una
ciudad está influenciada por el desarrollo suscitado en
dos ciudades importantes: Buenos Aires y Córdoba. En
el caso de la primera, la división de los Barrios Norte
y Sur se suscitó por problemas de salubridad como la
gran epidemia de fiebre amarilla de 1871. Si bien des-
de 1852 comenzaron a aparecer brotes de fiebre ama-
rilla (muy similar al actual dengue), con la vuelta de
los soldados infectados que participaron en Paraguay
de la Guerra de la Triple Alianza. La gran mortandad,
sobre todo en el barrio de San Telmo, provocó que las
clases adineradas se trasladasen al norte de la ciudad
con el fin de escapar de la epidemia. Los más afectados
fueron los inmigrantes europeos que moraban en con-
ventillos, como la población negra que, cercada por el
Ejército impidiendo su traslado a otros sectores libres
de la enfermedad, murieron por miles siendo esta una
de las causas de su desaparición en Argentina.
Aquí se afirma una línea divisoria, dicotómica,
entre las clases sociales que todavía se mantienen en
Si tomamos como ejemplo
estas ideas de boulevard, en
la actualidad, en el Barrio Sur,
tema que nos compete, todavía
se encuentra uno característico
de la ciudad: el boulevard Gene-
ral Lavalle (...)
image/svg+xml
Voces Recobradas
40
Voces Recobradas
40
Plaza San Martín: Arriba vista actual y estatua
ecuestre del Libertador.
A la derecha, vista panorámica de la Plaza San
Martín a principios del siglo XX.
Abajo, imágenes de la Plaza Belgrano, antiguamente
el Campo de las Carreras, donde las fuerzas criollas
se batieron en batalla contra los realistas el 24 de
Septiembre de 1812, victoria que aseguró el triunfo
de la Revolución de Mayo. La estatua del prócer en
1916, y hacia la derecha, la estatua y el monumento
actual.
image/svg+xml
41
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
41
la actualidad: los grupos dominantes en el Barrio
Norte y los sectores populares en el Barrio Sur. Los
nuevos estudios van a caracterizar al Barrio Sur (de
Buenos Aires) como una zona industrial “desparra-
mada por todos los barrios”
16
.
Este barrio siempre
tuvo una desatención tradicional por parte de los
distintos gobernantes de la ciudad: a pesar de contar
con un área altamente comercial, las mejoras urba-
nísticas siempre llegaban primero al Barrio Norte.
Encontramos similitudes en este caso histórico
–la fiebre amarilla− con la epidemia de cólera suce-
dida en Tucumán (1886-1887), la cual no conllevó
a una división entre el Norte y el Sur de la ciudad
de San Miguel de Tucumán. Sin embargo, la “moda”
de que los grupos dominantes porteños se radicaban
en el Norte de la ciudad, también provocó en esta
capital provincial una acción similar: mudarse ha-
cia el Barrio Norte en el caso de las familias tradi-
cionales o en el caso contrario de los sectores bajos
de la sociedad tucumana migrar hacia el sur de la
ciudad. Antinomia característica que por cuestiones
tradicionales, desde el último cuarto del siglo XIX,
se mantiene actualmente.
4. b. Algunas características históricas del Barrio Sur
Ahora comenzaremos a delinear al Barrio Sur. Actualmen-
te, este populoso barrio de la ciudad de San Miguel de Tu-
cumán se encuentra delimitado de la siguiente manera:
• Tomamos como eje la calle General José M. Paz
desde la calle Gregorio Las Heras hasta Jujuy (de
Este a Oeste).
• Jujuy hasta Av. 24 de Septiembre (de Sur a Norte).
• De Este a Oeste, por 24 de Septiembre hasta Aveni
-
da Leandro N. Alem.
• De Norte a Sur de Avenida Leandro N. Alem hasta
la Avenida Julio Argentino Roca.
• Por Avenida Julio Argentino Roca, de Oeste a Este,
desde Avenida Leandro N. Alem hasta la calle Gre-
gorio Las Heras.
Entre los edificios y espacios públicos más im-
portantes podemos citar: la Municipalidad de San
Miguel de Tucumán; las plazas José de San Martín,
Bernardino Rivadavia, Manuel Belgrano (donde
se desarrolló el 24 de Septiembre de 1812 la bata-
lla de Tucumán) e Hipólito Yrigoyen; el Palacio de
Tribunales de la Provincia de Tucumán; la sede del
mayor gremio provincial: la Federación Obrera de
Trabajadores de la Industria Azucarera (FOTIA); el
Rectorado de la Universidad Nacional de Tucumán
(UNT); las Facultades de Medicina, Bioquímica y
Farmacia, Bellas Artes; las Escuelas experimentales
secundarias dependientes de la UNT como Instituto
Técnico o de Bellas Artes; las Escuelas secundarias
como las Escuelas de Comercio N° 2 y 3, la Escuela
Congreso de Tucumán (ubicada en donde funciona-
ba la ex Escuela de Educación Técnica N° 2 “Obispo
Colombres”); las Escuelas primarias como la Presi-
dente Avellaneda, Escuela de la Patria; los Hospita-
les públicos como el centenario Hospital Padilla o el
de Niños “del Niño Jesús”; los Colegios confesiona-
les tradicionales como el de las Hermanas Esclavas;
numerosos clubes deportivos, como Central-Córdo-
Despensa “El Internacional”, de Basilio Alul. Calles San Lorenzo y San Luis. Barrio Sur.
image/svg+xml
Voces Recobradas
42
Voces Recobradas
42
ba, Caja Popular, Independiente, Belgrano, All Boys,
entre otros.
Las divisiones territoriales se presentan de
dos maneras: por la identificación y/o pertenencia
con el barrio y por la división política municipal.
La primera, que caracteriza a la memoria colectiva
desarrollada por los vecinos, el Barrio Sur −por esa
misma ubicación cardinal− contemplaría también el
sector ubicado entre las calles Gral. Paz al Norte, Las
Heras al Oeste, Avenida Sáenz Peña al Este y Aveni-
da Roca al Sur. En la segunda, la Municipalidad de
San Miguel de Tucumán reconoce que su territorio
político está dividido por “distritos”, autonómica-
mente desarrollados, por su histórico crecimiento,
por su actividad comercial o por las mismas acciones
gubernativas. En este sentido, este sector que hemos
mencionado en este presente párrafo correspondería
al barrio, sector, distrito conocido por los tucuma-
nos como El Bajo:
El Bajo es importante porque es una de las pocas
zonas que tiene identidad: porque es una de las po-
cas zonas de la ciudad que tiene todavía identidad
propia: Barrio Norte… Barrio Sur…
El Bajo
lo tiene,
pero cada vez como va perdiendo por esta cosa de la
globalización, y que empiezan a aparecer los edificios
de altura…
17
En este caso cabe explicar lo siguiente: el crecimien-
to poblacional y económico-comercial de San Mi-
guel de Tucumán escapa a las geografías conocidas
como el Microcentro (o antiguo casco fundacional
colonial). En el caso del desarrollo comercial, este
rubro está en constante expansión: comienza a sa-
lir del Microcentro y ubicarse, por un estudio de
marketing en las zonas más pudientes (en este caso
Barrio Norte), con el fin de que las inversiones eco-
nómicas de los agentes privados tengan réditos en el
corto y mediano plazo. Pero no sólo el crecimiento
comercial, que se está extendiendo hacia el Barrio
Sur, mantiene preocupados a sus habitantes: tam-
bién lo es la construcción de edificios.
El Microcentro se va ampliando más y va tomando
parte de Barrio Norte
(cosa que todavía no ha pasa-
do completamente en el Barrio Sur)
. El Barrio Sur es
como que todavía mantiene unas fuertes caracterís-
ticas todavía residenciales. Lo que sí está pasando es
que está apareciendo como una de sustitución de ar-
quitecturas bajas por arquitectura alta: están apare-
ciendo edificios en altura porque obviamente se está
saturando lo que es el Microcentro y lo que es la zona
norte de la ciudad…
18
4. c. El Barrio Sur y la memoria de los vecinos
Como analizamos anteriormente, el modelo urba-
nístico liberal dio un impulso a la organización de
la ciudad de San Miguel de Tucumán. Para las pri-
meras décadas del siglo XX, el Barrio Sur ya se dife-
renciaba del Barrio Norte. No sólo por el constante
acomodamiento de las clases sociales según el lugar
de morada de las familias, sino por la forma de vida
que van adquiriendo los vecinos de la ciudad.
Según Beccari, otro rasgo importante del Ba-
rrio Sur es el tema del arbolado. En Barrio Norte,
por ejemplo, las calles tienen un arbolado distinto.
Un arbolado más grande, un arbolado de gran por-
te, cosa que en el Barrio Sur no. Normalmente en
el barrio que estamos estudiando, el naranjo es el
árbol característico. Ese es como otro rasgo, como
distintivo que hace a la identidad barrial.
El arbola-
do, anecdótico, es interesante no sólo por cuestiones
de adaptar un clima al vecindario sino también para
entender los diversos paisajes urbanos realizados
dentro de una misma ciudad.
Pero la construcción de la identidad de la gente
con el barrio va de la mano de la historia y la memo-
ria colectiva. Por este motivo, proponemos rescatar
las vivencias de los vecinos para conocer aún más
al Barrio Sur. Antes de introducirnos al análisis de
la HO, es necesario aclarar lo siguiente: el respeto
de nuestros entrevistados. En ciertos casos, algunos
de ellos nos permitieron publicar sus nombres como
una forma de dar veracidad a las fuentes históricas.
En otro caso, respetamos a los vecinos que no nos
permitieron revelar su nombre, aunque fueron im-
portantes para entender el proceso de cambio socio-
urbanístico desarrollado en el Barrio Sur. En este
sentido, las personas que no nos han permitido la
publicación de su nombre, los identificaremos como
“caso N°…”
según la ubicación que hayamos dado al
análisis de sus memorias.
Desde 1950 o años antes, la integración social
del Barrio Sur ya estaba configurada. Muchos des-
image/svg+xml
43
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
43
cendientes de nativos o de inmigrantes, quienes se
radicaron y comenzaron a desarrollar una actividad
comercial, fue una nota característica del período a
analizar. El caso N° 1, “la Sra. Alul” fue interesante.
Su padre, Basilio Alul, fue uno de los primeros in-
migrantes en montar un negocio en el noroeste del
barrio. Según la entrevistada, la idea original de su
padre era viajar de Siria a Brasil para establecerse en
ese país y poder “hacer la América”. Por un moti-
vo en especial, su futura esposa –a quien ya conocía
desde Siria− don Basilio no desembarcó en Brasil y
continuó hasta Argentina. Siguiendo con el relato de
“la Sra. Alul”, la única palabra que pudo decir su pa-
dre en la Aduana –donde le cambiaron el apellido de
“Aluz” por “Alul”− fue “Tucumán” o una pronuncia-
ción similar (lugar donde se encontraban sus com-
patriotas). Aquí formó su familia y se estableció en
el terreno de San Lorenzo al 1300 (esquina San Luis)
donde administró su propio negocio llamado “Des-
pensa El Internacional”. A la muerte de Basilio Alul,
sus hijos abandonaron el almacén y se dedicaron a
sus profesiones
19
.
Otro vecino que recuerda sus vivencias en el Ba-
rrio Sur es Abraham Kotler. Nacido el 7 de octubre
de 1931 (79 años)
20
en la calle 9 de Julio
“casi Esquina
Bolívar”
, como nos aclaró, en pleno Barrio Sur, nos
relata ciertas características del barrio. Su familia
estaba compuesta por sus padres y una hermana mu-
jer. No vivió siempre en la casa que lo vio nacer:
(…) después nos cambiamos dentro del barrio a la calle
Las Heras casi Avenida Roca. Ahí, mi padre
(Isidoro
Kotler)
tenía un negocio y ahí vivimos. Y después nos
cambiamos porque los padres de él, o sea, mis abuelos,
tenían una venta de pan en la misma esquina (donde
ahora hay una golosinería). Y bueno, en esa época
el
barrio
no tenía el desarrollo que tiene ahora: andaban
los vendedores de leche con las vacas, se paraban fren-
te a las casas y las ordeñaban delante de uno. O sea,
“leche al pie de la Vaca”
(parafraseando el nombre de
un tambo local que utilizaba esa frase como denomi-
nación del alimento que comercializaba).
21
La familia Kotler, de origen judío, es proveniente de
Ucrania. Don Kotler nos relata brevemente la histo-
ria de su familia:
Vinieron para acá
(la familia de su padre estaba casi
toda acá –en Argentina−)
muchos de ellos incluso en
Tucumán. Así que primero estuvieron en Salta. En
Salta nació mi hermana, que tiene casi seis años más
que yo. Después pasaron a Jujuy y después de ahí a
Tucumán, mi madre venía embarazada de mí, en el
año 31, año que yo nací.
22
En el momento del viaje de su padre, desde Euro-
pa oriental a la Argentina, en su lugar de origen se
habían producido cambios políticos que, con el de-
sarrollo del siglo XX, cambiarían el curso de la his-
toria mundial:
Ucrania formaba parte de Rusia
(zarista)
. Y mis pa-
dres figuran como rusos. Después vino la revolución
bolchevique
(…) en la época en que gobernaban los
zares en ese país, en Rusia, Polonia eran antisemitas.
Se discriminaba a los judíos. Incluso hasta para estu-
diar. Era muy complicado. Cuando llegó el Comunis-
mo, se terminó esa historia (...) Cambió el trato…
23
Una vez instalados en el Barrio Sur tucumano, la fa-
milia Kotler mantuvo por muchos años un almacén,
el cual es recordado por los vecinos más tradiciona-
les de la zona. Y eran valorados por el sacrificio y el
trabajo que desarrollaban en el día a día. Al pregun-
tarle si era el único almacén en ese sector de la zona,
don Kotler nos contesta que no, que había otros al-
macenes. Pero los ingresos económicos de la familia
se acrecentaban por la venta de prendas de vestir:
Nuestros entrevistadores con el Sr. Abraham Kotler, octubre de
2010.
image/svg+xml
Voces Recobradas
44
Voces Recobradas
44
(…) mi padre aparte
(del almacén)
vendía ropa que la
llevaba en su bicicleta. Y se iba en bicicleta
hasta
cer-
ca de Bella Vista
(casi treinta y dos kilómetros hacia
el sur de la capital provincial)
con todo un “paque-
tón” de ropa para vender
.
24
Otro de nuestros entrevistados, Cristina Juárez, nos
narra sus recuerdos, mostrándonos cómo vivían en
el Barrio Sur y la importancia de lo cotidiano en lo
que respecta a al movimiento en este territorio. Para
Juárez, el barrio cambió mucho desde su juventud,
sobre todo cuando recordó a los medios de transpor-
tes que transitaban por las calles del mismo:
(…) la diferencia que noto, que las calles antiguas
eran empedradas, los transportes eran los mateos o
cocheros, el viejo tranvía, el “trole” que circulaba por
las calles. La estación de trenes…
25
Según Juárez, el más popular de los transportes era
el ferrocarril, para trasladarse a cualquier punto de
la provincia, región o del país. Sin embargo, nos re-
cuerda que también existía el tranvía para movili-
zarse dentro del centro de la ciudad y los de tracción
a sangre, como podían ser las “jardineras” (carros
rústicos, utilizados como vehículos de carga) o los
anteriormente nombrados mateos (de paseo). Pero
Juárez también nos representa al Barrio Sur con
prácticas agrícolas provenientes del siglo XIX, exis-
tentes a principios del XX, que ya se han perdido en
la actualidad, por lo menos en esta zona, y que lo-
gran tener un efecto sociabilizador para los tiempos
vigentes:
E.:
¿Cuál fue la situación económica que usted re-
cuerda del barrio?
C. J.:
Y bueno, anteriormente la gente se dedicaba a
la agricultura, cada uno tenía una porción de tierra,
en esa tierra cosechaban, cultivaban. Lo que cosecha-
ban era para consumo de la familia y también hacían
un trueque, o ya sea, un intercambio de sus alimentos
que tenía, ya sea de animales o de verduras, lo que
tuviera, hacían intercambio con otras familias…
26
Kotler recuerda cómo funcionaban los tranvías en el
Barrio Sur:
Sí, pasaba la línea 3 (que iba por avenida Roca), la
línea 7 y después la línea 1 que venía por Calle Con-
greso de Norte a Sur.
27
De la misma manera que se realiza en la actualidad,
los estudiantes gozaban de descuentos para movili-
zarse, lo que hacía del tranvía un adecuado y acce-
sible medio de transporte para las clases medias y
populares. En una época también funcionaron los
trolebús, pero la insistencia de las nuevas empresas
de transporte automotor provocaron la efímera vida
de este transporte público. El tranvía, superado por
los tiempos modernos y por las firmas de transporte
automotor, había dejado de funcionar en los prime-
ros años de la década de 1970.
En lo que respecta al plano educativo, el Barrio Sur
tiene numerosas instituciones educativas. Una de las
más representativas es la Escuela Alberdi. Este es el
caso de Kotler, quien nos relata lo siguiente:
Mis estudios primarios los cursé en la escuela Alber-
di. En esa época recibían algunos varones, hablo de la
Escuela Alberdi turno mañana, que incluso yo estuve
en la inauguración.
28
No eran muchos los varones que cursaban en esta
escuela:
Éramos seis varones. Muchos de ellos eran de las fa-
milias de algunas de las maestras de ahí. La escuela
ésta, Alberdi, funcionaba en la calle Alberdi. Después
hicieron un edificio nuevo que prácticamente lo in-
auguramos nosotros… Y los chicos nos ocupábamos
de, por medio de la cooperadora, le daban un pan a
cada alumno. Así que nosotros íbamos con un canasto
grande grado por grado dándoles el pan a las chicas.
Ahí estuve porque en esa época no era primero, se-
gundo y tercero
(como la última renovación de la ley
N° 1.420 o la actual Ley Nacional de Educación)
sino
que era primero, primero superior y segundo grado.
29
En el caso de Ernesto Ávila, la escuela Alberdi fue
muy importante para su formación futura:
En la primaria fui a la escuela Alberdi, Las Heras al
400... En la secundaria fui a la escuela comercio N°1
.
image/svg+xml
45
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
45
Sin embargo, la problemática lo llevó a desarrollar
actividades más vinculadas a un adulto que a un ni-
ño-adolescente:
(…)
la vida
fue muy dura para mí porque… tuve que
costearme yo mis propios estudios, ya que mi padre
murió cuando yo era niño y éramos diez hermanos,
entonces había que llevar un pucherito a la casa, un
pedazo de pan y tuve que trabajar desde niño… desde
los ocho años, trabajar y estudiar, gracias a Dios pude
hacer las dos cosas.
30
4. d. La transformación urbanística
De aquellas calles adoquinadas, en formas de arcos,
ya quedan muy pocas en el Barrio Sur: el pavimen-
to, símbolo de la modernización, tapó muchos de los
recuerdos barriales. Tampoco se ven niños rebeldes
que toman para sí parte de la calle para librar un
partido de futbol, ya que el tránsito también ha cre-
cido en las últimas décadas. Todos los vecinos nota-
ron una fuerte transformación del barrio a formar
parte del Centro de la ciudad:
Si hubo cambio… lamento mucho, lamento mucho
que el cambio que se dio no fue el mejor, ya que en
aquella época de mi adolescencia, mi juventud, mi
niñez, la gente en el barrio éramos solidarios y aún
incluso en el secundario, todos los compañeros del se-
cundario salíamos a compartir sábado a sábado en
la casa de cada uno con nuestra familia, compartir
la alegría, compartir la diversión. Compartíamos el
ayudarnos a crecer y ser mejor ya sean a través de
sketch de obras teatrales, ya sea del mismo baile o
cantar… compartir todo.
31
Cuando a Kotler, por ejemplo, se le pidió un análisis
social, sobre todo a partir de 1946, año coinciden-
te con el inicio del primer gobierno peronista, éste
se refirió a una configuración sociopolítica del Ba-
rrio Sur, como sectores medios que en su mayoría no
apoyaban políticamente al peronismo. Si bien estos
eran jóvenes profesionales, nunca dejaban de lado la
sociabilidad con las personas que vivían alrededor
de sus hogares. Los estrechos vínculos sociales que
se caracterizan a un determinado barrio es lo que se
está perdiendo en el Barrio Sur:
El barrio cambió poco. Antes era una zona más socia-
ble. Ahora se comparte menos con los vecinos, porque
la mayoría de la gente es profesional y pasa la mayor
parte del tiempo fuera de su casa.
32
Sin perder el análisis en cuestión, nos acercamos al
tema de la inseguridad. El crecimiento poblacional,
la falta de trabajo genuino, los flagelos actuales y
una justicia lenta, posibilitaron un crecimiento de
este mal social. Según algunos entrevistados, en
otras épocas, existía tal seguridad que se daban el
lujo de ir a acostarse por las noches sin cerrar las
puertas de la casa con llave. Pero las problemáticas
sociales, económicas, educativas y culturales, tam-
bién han cambiado y provocaron una crisis a las
prácticas cotidianas de la sociedad. Cristina Juárez
opina al respecto:
Bueno, la sociedad actual está sometida a un ritmo
muy acelerado. Para la sociedad actual lo primordial
es, el trabajo, la educación, la salud, la seguridad, la
vivienda, y la familia, vivir en democracia son pri-
mordiales para vivir dignamente. Eso es lo que pienso
de la sociedad.
Cuando nuestros entrevistadores le preguntan sobre
la inseguridad, Juárez trata, desde una visión senci-
lla y hogareña, dar una respuesta contundente para
nosotros:
Las nuevas construcciones del Barrio Sur, vistas desde la Escuela
Congreso de Tucumán.
image/svg+xml
Voces Recobradas
46
Voces Recobradas
46
No es que antes había más seguridad, lo que pasa
que no había tanta gente mala, no había tantos de-
lincuentes, antes la palabra, la palabra de la persona
era como una ley, se respetaba mucho la palabra, se
ponían de acuerdo entre esas personas o más, no es
cierto, y la palabra se respetaba y hoy en día eso no
sucede porque cambiaron… todo, todo, todo es dis-
tinto.
33
La mayor transformación del Barrio Sur es sin duda
la construcción de los edificios de altura. La satura-
ción edilicia del Barrio Norte, posibilitó la búsqueda
de las empresas constructoras de terrenos cercanos
al Microcentro tucumano, sobre todo en el primero.
El problema que detectamos es que los negocios in-
mobiliarios, una vez que consiguen un terreno para
la futura edificación, no respetan ciertas casas o fa-
chadas de estas que representan parte del patrimo-
nio arquitectónico de la ciudad. Por ejemplo, Ávila
entiende que el crecimiento del barrio, en épocas
pasadas, fue lento, no tan abrupto. Sin embargo, el
cambio del paisaje urbano del Barrio Sur, en la últi-
ma década, ha cambiado de manera desenfrenada
:
(…) un barrio puede cambiar en dos o tres años con
la construcción de edificios como vemos. En aquel
momento
(en tiempos pasados)
era más lento, porque
el progreso parecía que se retrasó un poco por esta
zona.
34
Parte de la entrevista llevaba a esta reflexión que
marca la idea colectiva de los antiguos vecinos de
la zona:
E:
¿Qué piensa usted de las construcciones que se
fueron haciendo?
E. A.:
Está bien, ya que puede cobijar a más gente...
Un edificio, si uno lo tuviera que repartir en un espa-
cio horizontal, se daría cuenta que es un barrio ente-
ro, ese edificio que está ahí, por ejemplo, mirá cuántos
departamentos tiene!... y eso parece un barrio entero,
por lo menos de cuatro o cinco manzanas…
35
Para otros vecinos, la aparición de los edificios fue
una irrupción rápida y constante. Nadie con exacti-
tud pudo explicarnos en qué año, pero calculan des-
de la década de 1980.
Y exactamente cuánto tiempo… no sé, pero se llena-
ron de torres… por todos lados acá. Edificios de de-
partamentos, está prácticamente lleno por todos la-
dos. Donde queda un terreno vacante, ahí nomás las
empresas lo compran y construyen.
36
Francisco Solís, otro vecino del barrio, se vio afecta-
do en su vivienda por la construcción de un edificio
lindero
:
Noto muchas construcciones en altura, lo cual perju-
dica a muchas de las casas que están construidas al-
rededor del edificio, ya sea por cómo está realizado, o
desconozco el motivo (…) Mi casa está arrastrada por
el edificio que construyeron, y ahora está inclinada,
las paredes están agrietadas.
37
Los grandes terrenos que ocupan las viejas casonas
de la zona, son parcelas tentadoras para las cons-
tructoras e iniciar la edificación de alguna nueva
torre. El negocio inmobiliario se ha convertido en
uno de los más rentables de la actualidad. Desde el
año 2003 camina de la mano con la recuperación
económica del país y posibilita un repunte de la in-
dustria de la construcción en general. No obstante,
la continua aparición de edificios de altura marca
una tendencia, en la que los vecinos la identifican
con la modernización y los avances tecnológicos del
barrio:
E.:
¿Tuvo muchos cambios el barrio?
Ufff... una barbaridad, al estar ahora rodeado de
edificios nuevos, estudios jurídicos, comercios, super-
mercado, confiterías, bares, cyber, hay mucho movi-
miento, mucho movimiento en el Barrio Sur, casas
de juegos, sanatorios, escuelas… Sí, muchos cambios
tuvo la zona sur, muchísimos cambios.
E.:
¿Los avances tecnológicos influyeron en el ba-
rrio?
Sí, todos los avances tecnológicos influyeron en el
barrio, por ejemplo, tenemos el Internet, la TV por
cable, el Direc TV, la telefonía móvil, y también en
la Municipalidad, que pertenece al barrio de la zona
sur, están todas las cámaras que donde se detectan
las infracciones de tránsito que se hacen en la capital,
digamos de la ciudad, dentro de las cuatro avenidas
de la capital.
38
image/svg+xml
47
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
47
Tres alumnas disfrutando del recreo dentro del Colegio de las
Hermanas Esclavas, San Miguel de Tucumán, 1956.
El Barrio ha cambiado. Los vecinos lo saben.
Ahora viene un proceso de adaptación que ya no
depende de los viejos habitantes, sino de las nuevas
generaciones que no disfrutarán de ciertas bondades
de la vida barrial como, por ejemplo, la sociabilidad
y la solidaridad de la que nace de la primera.
5. Conclusión
Esta es una primera aproximación a la historia del
Barrio Sur. Lejos quedan los recuerdos de los veci-
nos acerca la tranquilidad del barrio, las reuniones,
los juegos en la calle, la sociabilidad constante entre
los habitantes. San Miguel de Tucumán, ciudad cos-
mopolita del país, continúa su crecimiento e impone
nuevos ritmos de vida a sus vecinos. Esos ritmos de
vida, acelerados –típicos de las grandes ciudades−
que de a poco imprimen nuevos códigos societales,
en muchos casos, van aislando a las personas. Ese
aislacionismo es consecuencia, en parte, de la inse-
guridad desatada desde la década de los 70, con el
terror de Estado, donde nadie estaba seguro de lo
que podía sucederle en cuanto salía a la calle. Los
tiempos actuales, llenos de impunidad, herencia
descarnada de la dictadura pero en manos de cual-
quier persona, hacen sentir solos y desprotegidos a
los vecinos, lo que permite mantener la idea de que
todo tiempo pasado fue mejor.
De los vendedores ambulantes que golpeaban
las puertas de nuestras casas a los hiper y supermer-
cados; de los mateos, jardineras, tranvías o trole-
bús a gran cantidad de automóviles (“cantidad” en
números y variedad), camiones y colectivos última
generación, una generosidad de la globalización ac-
tual. De los cines barriales a la televisión satelital.
Quizás las escuelas no hayan cambiando demasiado
en su estructura, sólo más aulas para más niños y/o
adolescentes que buscan la oportunidad de seguir
estudiando. Hospitales de mayor tamaño y comple-
jidad para que los avances de la medicina tengan
incidencia en toda la población. Los grandes edifi-
cios reemplazando las antiguas casonas de grandes
terrenos de la zona. Aquí es donde la sociabilidad
barrial comienza a quebrarse: a mayor cantidad de
personas, mayores ocupaciones, menos tiempo para
compartir y conocerse. Si bien las plazas continúan
siendo un importante espacio de esparcimiento y re-
creación, numerosos son los grupos sociales que la
ocupan, sin saber –en muchos casos− que quien está
en frente de ellos, realizando ejercicios físicos, por
dar un ejemplo, vive en el piso de arriba del mismo
edificio…
Este es el inicio de una serie de investigaciones
donde priorizaremos la utilización de las fuentes
orales como forma primaria de realizar el rescate de
la memoria colectiva de los habitantes del Barrio Sur
tucumano. Hemos realizado, en nuestro entender,
un modesto aporte a un tema todavía poco inves-
tigado como la historia de los barrios tucumanos.
Ojalá que nuestros ciudadanos, cerca del Bicentena-
rio de la Independencia argentina, aprendan a valo-
rar y preservar nuestra ciudad, dejando un legado
para las generaciones venideras.
image/svg+xml
Voces Recobradas
48
Voces Recobradas
48
Notas
————— ————— ————— ————— ————— ————— ————— ———
1
En colaboración de los alumnos del Año 1ro., División 3ra. de
la Escuela Secundaria Congreso de Tucumán, año 2010: Nicolás
Cantone, Mónica Vizgarra, Ana Luz Medina, Fernanda Trejo,
Analía Córdoba, Sofía Gómez, Gabriela Argañaraz, Sol Rome-
ro, Florencia Torres, Andrea Rojas, Walter Valdéz, Emmanuel
Suleta, Nicolás Castillo, Pedro Jeréz, Javier Ávila, Sergio Espe-
che, Jorge Amado, Lucas Quinteros, Emanuel Frías, Monteros
Jorge, Vaca, Santiago.
2
Desde ahora HO.
3
Liliana Barela, Mercedes Miguez y Luis García Conde,
Al-
gunos apuntes sobre historia oral y cómo abordarla
, Buenos
Aires, Dirección General Patrimonio e Instituto Histórico,
2009, p. 15.
4
Mauricio Menjivar Ochoa, “Los estudios sobre la memoria y
los usos del pasado: perspectivas teóricas y metodológicas” en
Menjivar Ochoa, Mauricio, Argueta, Ricardo Antonio, Muñoz,
Edgar Solano,
Historia y memoria: perspectivas teóricas y me-
todológicas
, Cuaderno de Ciencias Sociales N° 135, FLACSO,
Sede Académica Costa Rica, San José, 2005, p. 21.
5
Pablo Pozzi, “El Programa de Historia Oral” en
Historia, voces
y memoria. Revista del Programa de Historia
Oral, T. I, Institu-
to de investigaciones Bibliotecológicas, Facultad de Filosofía y
Letras, Universidad de Buenos Aires, 2009, p. 7.
6
Liliana Barela, Mercedes Miguez y Luis García Conde,
op.cit.
, p. 10.
7
Liliana Barela; Francis La Greca y José Sánchez,
Barrio y Me-
moria
, Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Bue-
nos Aires, 1992.
8
Hebe Clementi,
Yo, italiana. Historias de vida de mujeres inmi-
grantes
. Tiempo de Ideas. Buenos Aires, Patronato Inca/GGIL,
1993.
−−
De la Boca… un pueblo
. Concurso de documentos y talleres
orales realizados con la gente de la Boca de antigua radicación.
Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires,
2000.
−−
Retiro, testigo de la diversidad
. Cuadernos N° 3: “El Retiro
como vestigio y como memoria”, “Hotel de inmigrantes”, “La
estación Retiro”, “Algunas precisiones sobre los inmigrantes de
países limítrofes”. Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciu-
dad de Buenos Aires, 1998.
9
Rubén Emilio Correa, “Historia de los barrios y villas de Sal-
ta”, Facultad de Humanidades, Editorial UNSa, 2005.
10
Danila Moreno y Ana Lia Chiarello, “La ciudad de papel, Los
proyectos de avenida dentro del casco fundacional” en
La Ge-
neración del Centenario y su proyección en el Noroeste Argentino
(1900-1950),
Actas de las VI Jornadas, San Miguel de Tucumán,
Centro Cultural Alberto Rougés, 2006.
11
Analía Salvatierra de Michel, “Primeras viviendas para obre-
ros en la ciudad de San Miguel de Tucumán. Ubicación en el
contexto socioeconómico” en
La Generación del Centenario y
su proyección en el Noroeste Argentino (1900-1950),
Actas de las
V Jornadas, San Miguel de Tucumán, Centro Cultural Alberto
Rougés, 2004.
12
María Jerez, “El Barrio Jardín de Tucumán” en
La Generación
del Centenario y su proyección en el Noroeste Argentino (1900-
1950),
Actas de las V Jornadas, San Miguel de Tucumán, Centro
Cultural Alberto Rougés, 2004.
13
María Jerez,
op. cit
., p. 136.
14
Arquitecto Marcelo Beccari, Jefe del Departamento de Pla-
nifcación Urbana del Municipio de San Miguel de Tucumán y
docente de la cátedra “Historia de la Arquitectura II” Facultad
de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de
Tucumán. Entrevista realizada en San Miguel de Tucumán el
día 24 de noviembre de 2010. Entrevistadores: Gustavo Cortés
Navarro, Nicolás Cantone, Javier Ávila, Agustina Aguilera y
Ana Luz Medina. El subrayado es nuestro.
15
Marcelo Beccari,
op. cit.
16
Cita tomada de los trabajos de Adrián Gorelik y Graciela Sil-
vestri. En González, Lidia y Marcela Vilela, “Introducción” en
Voces del Sur: construcción de identidades barriales
, Cuaderno
N° 6, Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos
Aires, 2006, p. 8.
17
Marcelo Beccari,
op. cit
. El subrayado es nuestro.
18
Ibídem
. El subrayado es nuestro.
19
“Sra. Alul” entrevista realizada en San Miguel de Tucumán el
27 de noviembre de 2010. Entrevistador: Prof. Gustavo Cortés
Navarro.
20
Fallecido en diciembre del 2011.
21
Abraham Kotler, entrevista realizada en San Miguel de Tu-
cumán, el 6 de octubre de 2010. Entrevistadores: Prof. Gustavo
Cortés Navarro; alumnos: Nicolás Cantone, Mónica Vizgarra y
Ana Luz Medina. Subrayado es nuestro.
22
Abraham Kotler,
op. cit
.
23
Ibídem
.
24
Ibídem
. El subrayado es nuestro.
25
Cristina Juárez: Entrevista realizada en San Miguel de Tucu-
mán, el 10 de octubre de 2010. Entrevistadores: alumnos Analía
Córdoba, Sofía Gómez, Gabriela Argañaraz, Sol Romero, Flo-
rencia Torres, Andrea Rojas, Walter Valdéz, Emmanuel Suleta,
Nicolás Castillo, Pedro Jeréz.
26
Cristina Juárez,
op. cit.
27
Abraham Kotler,
op. cit.
28
Ibídem
.
29
Ibídem
.
30
Ernesto Enrique Ávila. Entrevista realizada en San Miguel de
Tucumán 25 de octubre de 2010. Entrevistadores: Javier Ávila,
Sergio Espeche, Jorge Amado, Lucas Quinteros, Emanuel Frías,
Monteros Jorge, Vaca Santiago.
31
Ernesto Enrique Ávila,
op. cit
.
32
Caso N° 1. Entrevista realizada en San Miguel de Tucumán,
el día 10 de octubre de 2010. Entrevistadores: Analía Córdoba,
Sofía Gómez, Gabriela Argañaraz, Sol Romero, Florencia To-
rres, Andrea Rojas, Walter Valdéz, Emmanuel Suleta, Nicolás
Castillo, Pedro Jeréz.
33
Cristina Juárez,
op. cit.
34
Ávila,
op. cit
.
35
Ibídem
.
image/svg+xml
49
Revista de Historia Oral
Revista de Historia Oral
49
36
Abraham Kotler,
op. cit.
37
Francisco Solís. Entrevista realizada en San Miguel de Tu-
cumán, el 10 de octubre de 2010. Entrevistadores: Analía Cór-
doba, Sofía Gómez, Gabriela Argañaraz, Sol Romero, Florencia
Torres, Andrea Rojas, Walter Valdéz, Emmanuel Suleta, Nico-
lás Castillo, Pedro Jeréz.
38
Cristina Juárez,
op. cit.
Bibliografía
————— ————— ————— ————— ————— ————— ————— ———
Barela, Liliana; Miguez, Mercedes y García Conde, Luis,
Algu-
nos apuntes sobre historia oral y cómo abordarla
. Buenos Aires,
Dirección General Patrimonio e Instituto Histórico, 2009.
Barela, Liliana; La Greca, Francis y Sánchez, José,
Barrio y Me-
moria
. Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Bue-
nos Aires, 1992.
Bonaudo, Marta (dir.), “Prólogo” en
Liberalismo, Estado y orden
burgués (1852-1880)
, T. IV, Nueva Historia Argentina. Buenos
Aires, Sudamericana, 2da. edición 2007.
−− y Sonzogni, Élida, “Los grupos dominantes entre la legitimi-
dad y el control” en
Liberalismo, Estado y orden burgués (1852-
1880)
, T. IV, Nueva Historia Argentina. Buenos Aires, Sudame-
ricana, 2da. edición 2007.
Clementi, Hebe,
Yo, italiana. Historias de vida de mujeres inmi-
grantes
. Tiempo de Ideas. Buenos Aires, Patronato Inca/GGIL,
1993.
−−
De la Boca… un pueblo
. Concurso de documentos y talleres
orales realizados con la gente de la Boca de antigua radicación.
Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires,
2000.
−−
Retiro, testigo de la diversidad
. Cuadernos N° 3: “El Retiro
como vestigio y como memoria”, “Hotel de inmigrantes”, “La
estación Retiro”, “Algunas precisiones sobre los inmigrantes de
países limítrofes”. Buenos Aires, Instituto Histórico de la Ciu-
dad de Buenos Aires, 1998.
Cortés Navarro, Gustavo, “Conocimiento científco, educación
y dominación socio-cultural. De la fundación del Colegio San
Miguel a la creación de la Sociedad Sarmiento. Tucumán, 1858-
1884” (Inédito), Escuela de Historia, Facultad de Humanidades,
Universidad Nacional de Salta, 2009.
González, Lidia y Marcela Vilela, “Introducción” en
Voces del
Sur: construcción de identidades barriales
, Cuaderno N° 6. Bue-
nos Aires, Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires,
2006.
Jerez, María, “El Barrio Jardín de Tucumán” en
La Generación
del Centenario y su proyección en el Noroeste Argentino (1900-
1950),
Actas de las V Jornadas, San Miguel de Tucumán, Centro
Cultural Alberto Rougés, 2004.
Moreno, Danila y Ana Lia Chiarello, “La ciudad de papel, Los
proyectos de avenida dentro del casco fundacional” en
La Ge-
neración del Centenario y su proyección en el Noroeste Argentino
(1900-1950),
Actas de las VI Jornadas, San Miguel de Tucumán,
Centro Cultural Alberto Rougés, 2006, p.
Páez de la Torre,
Historia ilustrada de Tucumán.
San Miguel de
Tucumán, Libreros y Editores Asociados, 1994.
Pozzi, Pablo, “El Programa de Historia Oral” en
Historia, voces
y memoria. Revista del Programa de Historia
Oral, T. I, Institu-
to de investigaciones Bibliotecológicas, Facultad de Filosofía y
Letras, Universidad de Buenos Aires, 2009.
Salvatierra de Michel, Analía, “Primeras viviendas para obre-
ros en la ciudad de San Miguel de Tucumán. Ubicación en el
contexto socioeconómico” en
La Generación del Centenario y
su proyección en el Noroeste Argentino (1900-1950),
Actas de las
V Jornadas, San Miguel de Tucumán, Centro Cultural Alberto
Rougés, 2004.
Fuentes orales
————— ————— ————— ————— ————— ————— ————— ———
-Caso N° 1. Entrevista realizada en San Miguel de Tucumán, el
día 10 de octubre de 2010.
-Ernesto Enrique Ávila. Entrevista realizada en San Miguel de
Tucumán 25 de octubre de 2010.
-Arquitecto Marcelo Beccari, Jefe del Departamento de
Planifcación Urbana del Municipio de San Miguel de Tucumán
y docente de la cátedra “Historia de la Arquitectura II”, Facultad
de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de
Tucumán. Entrevista realizada en San Miguel de Tucumán, el
día 24 de noviembre de 2010.
-Francisco Solís. Entrevista realizada en San Miguel de
Tucumán, el 10 de octubre de 2010.
-Cristina Juárez. Entrevista realizada en San Miguel de
Tucumán, el 10 de octubre de 2010.
-“Sra. Alul”, entrevista realizada en San Miguel de Tucumán el
27 de noviembre de 2010.
-Abraham Kotler, entrevista realizada en San Miguel de
Tucumán, el 6 de octubre de 2010.