image/svg+xmlDecir y escuchar, mostrar y ver son verbos que se conjugan en democracia. No es casual, por tanto, que el desarrollo de la historia oral y la visibilización de la diversidad cultural o de los grupos sociales no hegemónicos sean procesos que acompañan la consolidación de democra-cias latinoamericanas desde hace tres décadas. De ello dieron cuenta tanto la 17ª. Conferencia Internacional de Historia Oral (Buenos Aires, septiembre de 2012) como el V Encuentro Latinoamericano de Historia Oral (San Salvador, marzo de 2013) de los cuales surgen tres de los cuatro trabajos que aquí presentamos.Desde Jujuy, Agustina Romero nos entrega un desta-cable trabajo sobre la comunidad gitana, tan cercana para todos pero también tan poco conocida. No se trata de una descripción colorida, sino de una investigación empírica con sólido respaldo teórico. La autora se centra en la cultural oral de los gitanos, identifica sus características y la particular cosmovisión que de ella emerge. Analiza representaciones mentales, conduc-tas, prácticas y realiza agudas observaciones sobre su relación con la cultura escrita hegemónica. Formula interrogantes a futuro que constituyen un aporte para la investigación académica,y una reflexión a tener en cuenta en la implementación de políticas sociales.Paula Serrao presenta un artículo sobre la historia local de la educación en el nivel de formación docente, en Buenos Aires, durante la década de 1970. Utiliza fuentes escritas y orales para analizar de qué modo impactaron los debates políticos e historiográficos en la currícula, los profesores y alumnos de la carrera de Historia del INSP J. V. González. El resultado enriquece la historia educacional e institucional, pero también matiza ciertos postulados generales sobre la juventud de los primeros años de la década de 1970.Cristiano Guedes Pinheiro trabaja sobre una de las muchas formas de oralidad popular de las comunidades negras del Brasil. Destaca su secular resistencia a la ho-mogeneización y al modelamiento de la educación for-mal, su capacidad de aunar transmisión e intercambio cultural, construcción identitaria y creación artística. Fundamenta teórica e históricamente la validez del re-lato oral junto a otras manifestaciones de saber popular, y propone su incorporación para enriquecimiento y mejoramiento del mundo en que vivimos Luis Rubén González Márquez, en El Salvador, aborda un tema difícil, por las complejas dinámicas grupales que involucra, y por el contexto macroinstitucional ecle-siástico que las contiene. Entrevista a integrantes de la Comunidad Monseñor Romero, indagando sus trayec-torias muy diferentes y su situación actual. Encuentra la dificultad de desprenderse totalmente del pasado de la guerra civil, y sus pertenencias grupales y visiones actuales. Señala relaciones conflictivas al interior de la Iglesia, o los vínculos con el resto de la sociedad. Nos acerca a formas organizativas de estos grupos católicos, a su modo de construcción de identidades e imaginarios y los valores que los sustentan. Esperamos que los trabajos elegidos para el número 33 de nuestra revista continúen con la labor que venimos desarrollando desde hace años: aportar al conocimiento de nuestras sociedades, recobrando las voces que viven en esos “rincones” menos iluminados de la diversidad cultural.L.B.EDITORIAL